Riqui Puig se siente muy defraudado. Esperaba que con Xavi Hernández su suerte cambiara, y comenzara a tener más protagonismo y minutos en el Barça. Así se lo había prometido Joan Laporta, que le pidió paciencia, y le aseguró que empezaría a ver recompensada su actitud. Porque siempre ha trabajado en silencio, y nunca ha alzado la voz, a pesar de que lo ha pasado muy mal, y se ha sido muy injusto con él. En especial, Ronald Koeman.
El joven interior tuvo que soportar críticas de todo tipo, tanto de la prensa, como por parte del técnico neerlandés. Y, en caso de que no hubiera sido despedido, tenía decidido hacer las maletas en el mes de enero, para irse a otro club donde sí pueda tener continuidad. Ofertas no le faltaban, y se hablaba de que José Mourinho estaba tanteando su incorporación, para que aterrizara en la Roma.
No obstante, el internacional español sub 21 descartó la posibilidad de irse del Camp Nou, al saber que el de Terrassa sería el nuevo entrenador. En un principio, iba a apostar por los jóvenes talentos formados en La Masía, y por un juego basado en la posesión y el control de balón. Es decir, que Riqui encajaba perfectamente en sus esquemas, y estaba llamado a tener un papel protagonista. Pero no ha sido así.
En los tres partidos que se han jugado con Xavi en el banquillo, Puig ha sido suplente en todos. Y tan solo ha saltado al campo ante el Espanyol, pues contra el Benfica y el Villarreal estuvo los 90 minutos sentado. Lógico que, a sus 22 años, se sienta enfadado y traicionado, y vuelva a tener pensamientos de hacer las maletas. Su progresión corre serio peligro, y no quiere estancarse, siendo suplente habitual.
Laporta tendrá que intervenir, pero el ‘6’ ya no se cree nada de lo que le digan. Y parece muy complicado que su situación vaya a cambiar en los próximos choques del Barça. De hecho, empeorará, pues hay que recordar que Pedri González todavía está lesionado, y, cuando vuelva, será imprescindible.
Mourinho vuelve a llamar a la puerta de Riqui Puig
Por suerte para Riqui, sigue teniendo varios clubes interesados en sus servicios. Sin ir más lejos, Mourinho no se olvida de él, y ha vuelto a contactar con su agente, para hacerle saber que quiere tenerle en sus filas. En la Roma, podría pelear por hacerse un puesto en el once inicial.
Lo que es seguro es que jugaría más que en el Barça. El de Matadepera siempre ha querido triunfar con la camiseta azulgrana, pero el tiempo pasa, y sigue sin poder cumplir su sueño.
No puede estar así toda la vida.