Uno de los jugadores que el Barça ha incluido en la lista de transferibles y que esperan que haga las maletas durante el mes de enero es Pablo Torre. Hans-Dieter Flick ha dado oportunidades al joven atacante y ha tenido algunas actuaciones decentes, pero la realidad es que no ha acabado de consolidarse. Y cuando ha salido como titular, no ha dado motivos para merecer más regularidad y para estar por delante de otros compañeros en las rotaciones.
Ni siquiera la lesión de Lamine Yamal provoca que el cántabro tenga más opciones de disponer de continuidad, y es uno de los principales candidatos a decir adiós más pronto que tarde. Solo falta por conocerse dónde se encontrará su próximo desafío, pero es evidente que su futuro pasa por salir del Camp Nou, donde tiene imposible jugar, por culpa de la presencia de otros cracks como Fermín López, Dani Olmo, Raphinha Dias, Frenkie de Jong, Pablo Paéz ‘Gavi’ o Pedri González.
Tampoco ha ayudado la vida nocturna que el ex del Racing de Santander y del Girona tiene lejos de los terrenos de juego, y que ha acabado con la paciencia de Joan Laporta y de Deco, que le dejaron muy claro que tenía que cambiar esto para poder quedarse en la plantilla. Aprovechando sus buenas cifras, tres goles y una asistencia en menos de 300 minutos, quieren traspasarlo y obtener una importante compensación económica, de unos 10 millones de euros.
Es decir, el doble de lo que pagaron en su momento, en verano de 2022, cuando Mateu Alemany recomendó esta operación, asegurando que era una apuesta de futuro, y que triunfaría en el Barça. Habían aparecido varias entidades de La Liga EA Sports que estaban dispuestas a acoger a Pablo en sus filas, y entre sus admiradores se colocaba al Villarreal, al Betis, a la Real Sociedad, al Sevilla, al Celta de Vigo, al RCD Mallorca o a CA Osasuna.
Pero la realidad es que nadie quiere realizar una inversión tan importante por Torre, y no pagarán tanto dinero. La fórmula que todos estudiaban era una cesión con una opción de compra no obligatoria.
Torre, un problema para el Barça
Viendo esto, Torre merece ser incluido entre los grandes problemas del Barça ahora mismo, y Deco está obligado a buscar una solución que pueda contentar a todas las partes implicadas.
Flick ya ha sido muy contundente al respecto, y ha dejado muy claro que quiere a Pablo fuera del club en el mercado de invierno.