Los New York Knicks han sido los únicos de la NBA que no se han posicionado sobre el asesinato de George Floyd. Mientras siguen las protestas en varias ciudades de los Estados Unidos, la franquicia de Nueva York está en el punto de mira.
Muchos deportistas han dicho la suya en las redes sociales y los mismos jugadores de los Knicks están molestos por la posición de la franquicia sobre este asunto.
"Sabemos que algunos de vosotros han preguntado si nuestra compañía hará una declaración pública sobre el asesinato de George Floyd por un agente de policía de Minneapolis", han escrito en un comunicado dirigido a los jugadores y empleados.
"Queremos que sepan que somos conscientes de la importancia del asunto y a la vez entiendan nuestra posición. La dirección del Madison Square Garden mantiene nuestros valores de respeto y lugar de trabajo pacífico", han seguido.
Y han añadido: "No obstante, no estamos más calificados que nadie para ofrecer nuestra opinión sobre asuntos sociales". Una relación que hace falta tener en cuenta es que James Dolan, propietario de los Knicks, es amigo de Donald Trump.