Desde que el fondo de inversión de Qatar llegó al Paris Saint-Germain, el club parisino se ha convertido en un polvorín. Al-Khelaïfi, a diferencia de lo que ha hecho el Manchester City, otro de los clubs que también ha recibido el espaldarazo financiero de un jeque de oriente medio, en cambio de intentar construir un proyecto que gire alrededor de un entrenador y una idea futbolística palpable, ha decidido juntar a las estrellas del momento para crear equipos que nunca han tenido algún líder desde el banquillo.
Ahora bien, el PSG ha llegado a juntar tanto talento en todas las posiciones del campo que, por mera inercia, han conseguido ganar un sinfín de Ligas francesas y llegar a una final de Champions League. Sin embargo, esto no parece ser suficiente para un equipo que sigue teniendo el objetivo pendiente de ganar la primera Copa de Campeones de la historia de su club. Pero esta temporada parece que lo tendrán complicado otra vez. La derrota por la mínima contra el Bayern de Munich ha dejado muy tocado a un vestuario que en las últimas semanas se ha convertido en un polvorín.
El tridente Messi - Neymar - Mbappé no ha funcionado
En los instantes posteriores del partido de octavos de final que disputó el PSG en casa, Mbappé, que llegó al partido muy tocado y que aún así fue capaz de revolucionar el partido en los últimos minutos anotando dos goles que fueron anulados por dos milimétricos fueras de juego, señaló la actitud y profesionalidad de alguno de sus compañeros. En Francia, se señaló a Neymar como destinatario de estas duras palabras.
Ahora bien, los dolores de cabeza de Neymar en París no se han quedado aquí. En las últimas semanas, varias informaciones que llegan directas desde Francia han señalado que la directiva del PSG está meditando seriamente si vender el próximo verano al 'crack' brasileño por menos de 50 millones de euros para cuadrar unas cuentas que en los últimos años están disparadas. Ahora bien, el '10' parisino tiene contrato hasta 2025 y no tiene intención de abandonar Paris. Por este motivo, es probable que si el brasileño no acepta marcharse, deberán olvidarse de poder renovar a Messi, el verdadero deseo de Qatar.
Neymar, de nuevo lesionado antes de un partido importante
Pero los problemas de Neymar no son solo extradeportivos. En el terreno de juego, el futbolista nacido en Sao Paulo ha vuelto a sufrir una dura lesión en el tobillo que no le permitirá estar en Munich para disputar el partido de vuelta de los octavos de final, en el que los hombres de Cristophe Galtier se jugarán más de media temporada. Por todos estos motivo, en Paris ya empiezan a querer a Neymar lejos de París, pero él no tiene intención de moverse y esto podría acabar con Messi fuera del Parque de los Príncipes.