Neymar volvió a la Ligue 1 después de haber superado el coronavirus y la noche de este domingo es una de las más nefastas en la historia del fútbol francés. El PSG disputó su particular clásico contra el Olympique de Marsella y los parisinos perdieron por la mínima (0-1).

El resultado fue lo menos importante y es que vivió una auténtica batalla campal en los minutos finales en el Parque de los Príncipes. Neymar protagonizó una de las imágenes de la noche y estuvo acusando al experico Álvaro González de racista hasta que al final lo agredió. El árbitro no lo vio en directo, pero el VAR le avisó: la decisión fue clara, expulsión.

Neymar Di Maria arbitre expulsado PSG Marsella EFE

El árbitro expulsa a Neymar después de haber agredido a González / EFE

"Es un racista, por eso le pegué", dijo el brasileño mientras salía del terreno de juego. Antes de ver la roja, en la primera parte, fue cuando se produjo el insulto que denuncia Neymar y Di Maria protagonizó otra escena vergonzosa. El argentino escupió al central, en plena pandemia del coronavirus, pero el VAR determinó que el escupitajo no impactó al defensa.

La respuesta de Neymar contra el racismo fue clara y no dejaba de decir "racismo no". Una vez se acabó el partido, la guerra siguió en las redes sociales. "Lo único que me arrepiento es no haberle dado a la cara a este imbécil", escribió el brasileño.

Condena total al racismo, pero la respuesta no puede ser la violencia. El brasileño añadió que el experico le dijo "mono hijo de puta" y reclamó que el VAR pusiera esta imagen.

La respuesta de González fue: "No existe lugar para el racismo. Carrera limpia y con muchos compañeros y amigos en el día a día. A veces se tiene que aprender a perder y asumirlo en el campo. Increíbles 3 puntos hoy".

La imagen del fútbol se mancha por partidos como estos que acabó con 12 tarjetas amarillas y 5 rojas.