El Espanyol mantiene vivo el sueño de la salvación tras vencer al Rayo Vallecano (1-2) en Vallecas. Por lo contrario, al conjunto madrileño se le complican las opciones de Europa.
El Espanyol vuelve a complicarse la vida regalando penaltis
Vallecas era una de las complicadas citas del Espanyol en su calendario de vida o muerte. El equipo de Luís García llegaba al duelo muy tocado después de la crítica derrota contra el Barça (2-4) y todo lo que comportó. Con todo, en los primeros minutos de su visita al Rayo, ha sabido impermeabilizarse de su comprometida situación y competir de tú a tú en un campo tan complicado como es el del conjunto franjirrojo.
Los locales han salido mejor, alentados por una afición que no había visto perder a los suyos ante el Espanyol en las últimas ocho visitas del conjunto perico a su territorio. No obstante, y aunque habían sido 'rayistas' los primeros ataques peligrosos del partido, quien ha golpeado primero ha sido el Espanyol por medio de Sergi Darder. El capitán blanquiazul recogía en el interior del área un gran centro de Brian Oliván, que después de un rechace de Lejeune y de la posterior cesión atrás de Óscar Gil, se convertía en el gol que hacía soñar al Espanyol con la salvación.
Con la momentánea ventaja en el marcador, el combinado barcelonés veía la salida del descenso a 1 punto de distancia. Seguía siendo inferior en el juego, pero mandaba en el electrónico y eso les estaba motivando a defender este marcador con uñas y dientes. No obstante, como el día de Sevilla, el Espanyol volvería a dispararse en el pie con un penalti infantil y absolutamente incomprensible. En Nervión lo cometió Vini Souza cuando Gueye no tenía opciones de disparo, pero hoy ha sido Óscar Gil quien, con la mano, ha regalado la ley del ex a Raúl de Tomás, que ha celebrado tímidamente ante su nueva afición.
Nico Melamed mantiene vivo el sueño
En la reanudación, Santi Comesaña ha tenido una clara ocasión de gol, pero el gallego no ha encontrado socio centrando atrás después de superar a Pacheco en una mala salida del portero espanyolista. Para confirmar el inicio loco de segunda mitad, Nico Melamed tendría una clarísima con un gran golpeo desde la frontal, pero la jugada pedía que el '21' correspondiera un desmarque de Denis Suárez, que le estaba proporcionando un dos contra uno.
Después sería Isi quien protagonizaría otra clarísima. Álvaro García dejaría clavado sobre el césped a Óscar Gil para habilitar a 'Isinho' dentro del área, pero el '7', a portería vacía y con Pacheco totalmente batido, enviaría a las nubes un gol cantado. Sería entonces cuando el Espanyol penalizaría con el segundo. De nuevo Sergi Darder sería el factor diferencial, marchándose de Trejo y de Comesaña y culminando una gran jugada con un disparo a la madera que recogería Nico para hacer el 1-2 a placer.
El Espanyol se aferra a un punto dorado
A partir del segundo del Espanyol, el Rayo ha vuelto a pisar el acelerador, pero esta vez, el conjunto perico ha sido mucho más sólido en defensa y ha estado más organizado sin balón. Luís García ha introducido a César Montes y a Keidi Bare y ambos han entrado con buen pie al partido. Y en este contexto, con el Rayo volcado al ataque, Javi Puado ha tenido el tercero a la contra, pero el delantero catalán ha perdonado ante Dimitrievski lo que hubiera sido la sentencia.
No obstante, el Espanyol ha sido capaz de aguantar las últimas acometidas del Rayo y mantiene vivo el sueño de la salvación. Ahora se encuentra aferrado a un punto dorado que lo separa de Valladolid y Getafe, siendo los 'azulones' quienes marcan la línea entre el cielo y el infierno.