La relación entre Umar Sadiq e Imanol Alguacil parece haber llegado a un punto de no retorno. El delantero nigeriano, que había generado grandes expectativas tras su llegada a la Real Sociedad, está viviendo un calvario deportivo esta temporada. Después de recuperarse de la grave lesión de ligamento cruzado que sufrió en septiembre de 2022, Sadiq no ha logrado encontrar continuidad, algo que, según sus propias palabras, no depende de él sino de la falta de confianza del técnico txuri-urdin.
La derrota de la Real Sociedad frente al Athletic Club en el derbi vasco fue el detonante de su descontento. Con el equipo perdiendo y sin delanteros puros disponibles, Imanol Alguacil tomó la controvertida decisión de no darle minutos a Sadiq, quien permaneció en el banquillo a pesar de que el equipo necesitaba desesperadamente un gol. Esta falta de oportunidades ha colmado la paciencia del delantero, que ha decidido alzar la voz desde su Nigeria natal.
En una entrevista concedida al periodista Oluwashina Okeleji, Umar Sadiq habló abiertamente sobre su frustración: "Desde que volví de la lesión, he tenido una buena reincorporación. Tan sólo he tenido algún pequeño problema físico. Estoy en forma y lo que necesito es continuidad, pero eso no depende de mí". Además, destacó su profesionalismo y esfuerzo diario en los entrenamientos, asegurando que está listo para demostrar su valía si se le da la oportunidad.
A pesar de su contrato con la Real Sociedad hasta junio de 2028, Sadiq no oculta que su situación actual es insostenible. Los números no juegan a su favor: ha disputado 8 partidos esta temporada, acumulando apenas 340 minutos y sin haber conseguido marcar ni un solo gol. Sin embargo, su escasa participación parece ser más una cuestión de confianza por parte del cuerpo técnico que de estado físico o rendimiento.
El entorno del delantero empieza a mover ficha para buscarle una salida en el próximo mercado de fichajes. Según fuentes cercanas, la falta de continuidad y las decisiones de Imanol Alguacil han llevado a Sadiq a solicitar activamente su marcha en enero. Su calidad no pasa desapercibida, y hay equipos en Europa interesados en ofrecerle una oportunidad para recuperar su mejor versión.
Mientras tanto, la Real Sociedad, que ha evidenciado graves problemas ofensivos esta temporada con sólo 11 goles en 14 jornadas, tendrá que replantearse su estrategia en ataque. Si finalmente se concreta la salida de Sadiq, el club txuri-urdin no dudará en acudir al mercado para reforzar una posición que se ha convertido en un dolor de cabeza.
El caso de Umar Sadiq es un ejemplo de cómo las tensiones entre jugadores y entrenadores pueden desencadenar decisiones drásticas. Todo apunta a que enero será decisivo para el futuro del delantero nigeriano, quien no está dispuesto a seguir relegado al banquillo.