Hace un año no había ni una sola posibilidad de que Erling Haaland pudiera ser jugador del FC Barcelona. Y es que Mino Raiola, su representante, no quería saber absolutamente nada de Josep Maria Bartomeu, con el que había mantenido más de una discusión en el pasado. Aun y no ser tan flagrante, este es el mismo problema que tiene Florentino Pérez, que sigue buscando la forma de acercar posturas con Raiola, con el que ha tenido problemas en el pasado.
El expresidente del Barça empezó a molestar al representante italiano ya en 2015, cuando vetó el fichaje de Paul Pogba, que había estado negociando con el entonces candidato Joan Laporta para convertirse en el gran fichaje de la temporada. Bartomeu, sin embargo, apostó por Arda Turan y Aleix Vidal. Y después se produjo el caso De Ligt, pues mientras De Jong fichaba por Barça, el central lo hacía por la Juventus por los inconvenientes que puso la entidad blaugrana a pesar del deseo del jugador de aterrizar en el Camp Nou.
Haaland, delantero del Borussia Dortmund / Europa Press
Haaland, el sueño del Barça
Ahora, sin embargo, la situación ha dado un giro de 180 grados. Y es que Mino Raiola mantiene una gran relación con Joan Laporta, lo que abre la puerta del Barça a la selecta lista del representante italiano, en la que figuran nombres como los de Haaland, Pogba, Verratti o Donnarumma, por solo citar a los 4 más mediáticos y conocidos.
A pesar de saber que habrá una dura disputa, el Barça aspira con las opciones intactas a poder fichar el próximo verano a Haaland, el nombre elegido para reflotar un proyecto que vive sus últimos meses de vida. El delantero saldrá de Dortmund con total seguridad, por lo que la subasta se avecina espectacular.
Pogba, De Ligt y Gravenberch también gustan
Haaland, sin embargo, no es el único nombre que gusta de la lista de Mino Raiola. El Barça, por ejemplo, ya ha tanteado el nombre de Paul Pogba, que al acabar contrato el próximo 30 de junio se ha convertido en uno de los caramelos del próximo mercado.
Otro jugador que gusta en el Camp Nou es De Ligt, un central que se adapta a la perfección al estilo de juego del Barça y que no acaba de despuntar en la Juventus. Con contrato hasta el 2024, el conjunto italiano no pondría objeciones a negociar un traspaso. Además, la dirección deportiva blaugrana también tiene entre ceja y ceja al centrocampista Ryan Gravenberch, perla del Ajax con una clase espectacular, y que también tiene en Raiola a su representante. Y otro nombre que gusta es el del central del Inter Stefan de Vrij, que acaba contrato el 30 de junio y sigue sin renovar su contrato. El Barça tiene acceso a la lista de Raiola, garantía de negociaciones complicadas, pero también de grandes jugadores.
Imagen principal: Joan Laporta, presidente del FC Barcelona / Carlos Baglietto