El Manchester City y el Barça, por su estilo de juego, son dos clubes llamados a traspasarse jugadores. En los últimos años, Eric García, Ferran Torres, Agüero, Gündogan y Joao Cancelo ya han hecho el cambio, de sky blue a blaugrana, y no se ha añadido Bernardo Silva por la mala situación económica del Barça. El City, por su parte, está muy pendiente de los jóvenes talentos de la Masia, donde puede pescar perlas con un estilo de juego ya asimilado. Y este verano, el equipo de Pep Guardiola ha intentado tentar a dos grandes joyas, Alejandro Balde y Lamine Yamal, aprovechando la buena relación que hay entre Txiki Begiristain y Jorge Mendes, representante de ambos jugadores.
El Barça se movió rápido, ya que Balde y Lamine son dos piezas fundamentales de futuro. Primero pactó la renovación del lateral izquierdo, con un contrato hasta el 30 de junio del 2028 y una cláusula de rescisión de 1.000 millones. El miedo, sin embargo, se trasladó al caso Lamine Yamal, muy distinto, ya que el extremo solo tenía 15 años.
Balde y Lamine Yamal, blindados
La dirección deportiva del Barça no tardó en pedir hora con Jorge Mendes, con el que también tenían encima de la mesa los nombres de Bernardo Silva, Joao Félix y Joao Cancelo. El plan fue esperar a que Lamine Yamal cumpliera los 16 años, para ofrecerle el mayor contrato posible para un futbolista de su edad. El Manchester City le ofrecía más dinero y ponerse a las órdenes de Pep Guardiola en el mejor equipo del mundo del momento. El Barça, por su parte, atacó por el aspecto sentimental, ya que Lamine Yamal siempre ha soñado triunfar de blaugrana.
El pacto se produjo durante la gira por los Estados Unidos. Lamine Yamal entraría en la dinámica del primer equipo, tendría el contrato más alto posible los dos próximos años, con una cláusula de 400 millones de euros y, cuando cumpla los 18 años, tendrá un contrato importante, de 5 años de duración y una cláusula de 1.000 millones de euros.
Jorge Mendes, clave
Antes de que se cerrara definitivamente el acuerdo, el Manchester City hizo un último intento, pero la decisión de ambos jugadores ya estaba tomada. Se siente importantes en el Barça, donde tienen la confianza plena de Xavi Hernández y pueden ser dos de las estrellas del nuevo Barça del futuro. En Manchester, en cambio, empezarían desde cero y con muchas posibilidades de ser suplentes.
El Barça, pues, logró blindar a dos de sus mayores perlas a pesar de tener menos músculo económico. Y en toda la operación, además, también jugó un papel primordial Jorge Mendes, que además encarriló la salida de Ansu Fati, al Brighton. Con los 2 Joaos se completaba un verano en el que el representante portugués ha sido clave a la hora de llevar a cabo la planificación deportiva pactada entre Xavi Hernández y Mateu Alemany.