Si el Barça monta un circo le crecen los enanos. Porque hasta el momento todos los planes de Joan Laporta le han salido mal, especialmente, en la planificación de la plantilla de cara a la próxima temporada. Su idea era deshacerse de una importante cantidad de jugadores que no tienen espacio en los esquemas de Xavi Hernández, sin embargo, prácticamente todos se han negado a salir. Y prefieren quedarse, aunque no jueguen, antes que irse a otros clubes.
Un ejemplo de ello es Martin Braithwaite, quien pareció no entender nada de lo que hablaron en la reunión que tuvo con el entrenador egarense. No pudo ser más directo y claro, y le comunicó que debía de buscarse un nuevo trabajo, ya que en el Camp Nou no cuentan con él. Así se lo ha demostrado en los últimos meses de competición, en los que no ha jugado absolutamente nada, a pesar de estar totalmente recuperado de la lesión que le mantuvo varios meses de baja.
Pero ni siquiera eso ha servido al internacional danés para querer cambiar de aires. Es consciente de que las ofertas que recibirá serán de entidades de un rango claramente inferior, y que no le podrán pagar el salario que actualmente percibe, además de no poder disputar la Champions League. Así que prefiere respetar el contrato que tiene firmado con la entidad culé, al que todavía le quedan dos años más antes de caducar. Solo una propuesta muy interesante le haría cambiar de opinión.
“Me lo estoy pasando muy bien en el Barça y todavía me quedan dos años de contrato. No he jugado mucho, pero tenemos un buen entrenador y sé que probablemente tendré la oportunidad si estoy aquí y trabajo duro” dijo el ex del Leganés en sus últimas declaraciones, después de ser cuestionado sobre su futuro. Ha desafiado a Xavi y a Laporta, y se ha mostrado firme en su decisión de no marcharse a ninguna parte. Está convencido de que es capaz de revertir la situación.
Cree que puede ganarse la confianza del entrenador catalán, y que puede acabar siendo un valioso miembro en la rotación, como ya lo fue con Ronald Koeman.
Braithwaite obstaculiza la llegada de un nuevo delantero
La negativa de Braithwaite a cambiar de aires está siendo lo que está complicando la incorporación de un nuevo delantero. En el Barça esperaban percibir una cifra cercana a los 10 millones de euros por él, lo que sumado a lo que conseguiría por Clément Lenglet, Riqui Puig, Samuel Umtiti, Sergiño Dest, Oscar Mingueza o Frenkie de Jong, permitiría recaudar mucho dinero. El suficiente para traer a un goleador como Robert Lewandowski.
No obstante, todos ellos están convencidos de que seguirán a las órdenes de Xavi el año que viene.
Laporta deberá de hacer algún milagro para desprenderse de todos.