Hans-Dieter Flick cruza los dedos para que pueda haber un final feliz para todos los jugadores que han sido descartados por el nuevo técnico del Barça. De momento las cosas no han ido como se esperaba, y además de no haber podido conseguir ningún fichaje todavía, no se han concretado las ventas de todas las piezas que no entran en los planes. Solamente han podido traspasar a Sergiño Dest, pero con esto no es suficiente en absoluto.
Porque sigue habiendo muchos futbolistas en el vestuario que no entran en los planes, como son los casos de Oriol Romeu, Ferran Torres, Íñigo Martínez, Vitor Roque o Raphinha Dias. ‘Hansi’ espera que Joan Laporta pueda encontrar una solución a este problema, o de lo contrario tendrán que quedarse en el Camp Nou. Y una de las primeras ventas que espera que se concreten es la de Clément Lenglet, que no tendrá una nueva reválida.
Como hizo Xavi Hernández, el entrenador alemán ha comunicado al ex del Sevilla, del AS Nancy-Lorraine, del Aston Villa y del Tottenham Hotspur que está obligado a recoger sus pertenencias, y buscarse un nuevo desafío. Pero en esta ocasión, quieren que se marche definitivamente, y no cedido otra vez. Desean perderlo de vista para siempre, y poder deshacerse de su elevada ficha, además de poder percibir una cantidad de dinero significativa, de unos 10 millones de euros.
A priori, en el Barça esperaban que no fuera un problema encontrar un comprador para el internacional galo, que no ha mostrado un mal rendimiento en la Premier League, donde ha estado durante los últimos dos años. Y habían aparecido muchos equipos dispuestos a acogerlo en sus filas, como es el caso del Bologna, de la Real Sociedad, del SSC Napoli o de la SS Lazio. Pero a la hora de la verdad, siguen sin llegar propuestas en firme.
Y el elevado salario que percibe Lenglet, de 16 ‘kilos’ brutos al año, provoca que sea muy complicado que algún equipo pueda acogerlo en sus filas si no acepta una rebaja importante.
Laporta se empieza a plantear la rescisión de contrato de Lenglet
Los días avanzan y no hay novedades que inviten al optimismo en este asunto, razón por la cual Laporta se ha comenzado a plantear la rescisión de contrato de Lenglet, y poner solución a este problema.
De esta manera dejarían espacio en el Barça, y Flick podría perderlo de vista para siempre. Pero tendrán que llegar a un acuerdo para que su finiquito no sea astronómico. Si esto no sucede, el mánager de 59 años tendría que hacerle espacio en el equipo.