Carlo Ancelotti cree que el Real Madrid tendría que suplir la baja de Toni Kroos. El alemán ha sido esta temporada una pieza fundamental, por lo que el italiano cree que el adiós del centrocampista debe ser sustituida. A ello se añade que Luka Modric ya no está para acumular demasiados minutos, lo que deja la línea del centro del campo del equipo tocada.
Y uno de los nombres que el Real Madrid ha puesto encima de la mesa es el de Martin Odegaard, exmadridista que ha explotado definitivamente en el Arsenal. El noruego, que después de brillar en la Real Sociedad volvió al Real Madrid, vivió en el ostracismo, con Zinedine Zidane en el banquillo, hasta decidir que lo mejor era aceptar la oferta del Arsenal, que estaba construyendo un equipo joven y de muchísima calidad.
Odegaard no quiere volver al Real Madrid
La operación, sin embargo, parece ser prácticamente imposible. Por un lado, porque Odegaard no ve nada claro dejar su actual zona de confort, después de una carrera inicial convulsa, con cambios de equipo y son lograr cumplir su sueño, triunfar vestido de blanco en el Real Madrid. Es cierto que Odegaard nunca ha entrado con Ancelotti, aunque está cómodo en el Arsenal, donde tiene opciones de ganar títulos.
Por otro lado, el Arsenal no tiene la intención de traspasar a Odegaard por una cantidad inferior a los 100 millones de euros, una cifra que el Real Madrid no quiere asumir, teniendo en cuenta que lo vendió al Arsenal a cambio de 45 millones de euros. El noruego sería el sustituto ideal de Kroos, tanto técnicamente como porque conoce la Liga y el Real Madrid, pero la operación parece prácticamente imposible.
La perla que nunca triunfó en el Real Madrid
El Real Madrid fichó a Odegaard cuando el noruego era una de las mayores perlas del fútbol europeo. Lo captó cuando solo tenía 15 años y se llevó a cabo un plan perfecto, ya que Odegaard fue creciendo poco a poco, triunfando en sus cesiones en el Heerenveen y en el Vitesse, hasta aterrizar en la Real Sociedad, donde acabó de explotar. Parecía que había llegado el momento de recalar en el primer equipo del Real Madrid, pero a Zinedine Zidane no le convenció, por lo que el jugador se fue cedido al Arsenal.
Y en el Emirates Stadium, sin la presión del Real Madrid, resurgió la versión espectacular de Odegaard, por lo que el club inglés accedió a pagar 45 millones para quedárselo en propiedad. La decisión fue todo un acierto, ya que el noruego siguió creciendo, hasta ser el líder de un Arsenal que esta temporada se ha quedado a las puertas de ganar la Premier League.