El Barça es un saco de problemas a estas alturas. Empate contra el Rayo Vallecano totalmente inesperado justo antes del inicio de la recta final del año. Y las sensaciones no mejoran ni un poco, igual que el juego, que está a años luz de lo que se desearía desde el club blaugrana. Y a pesar del retorno de Pedri González y Frenkie de Jong, desde el Barça saben que no pueden seguir tapando el problema ellos solos.
Problemas con Oriol Romeu
"No tiene nivel Barça, es de vergüenza", se ha leído en las redes sociales. Y es que lo que los aficionados culés dicen es que Oriol Romeu no puede seguir teniendo partidos como titular en este Barça. El mediocentro catalán no acaba de encontrar su sitio y queda claro que tiene que dar un paso adelante como sea. Fue un futbolista importante y resolutivo al inicio de temporada, pero ahora ya no es así y cada vez que sale al campo es para decepcionar.
Contra el Rayo Vallecano se le vio impreciso, sin saber dónde tenía que estar e interpretar el juego del equipo ni los movimientos de sus compañeros. Cada vez que tenía el balón en los pies era un peligro y dejó más de una perla que podría haber costado un gol en contra del Barça.
Es por eso que los culés creen que Oriol Romeu es uno de los problemas más importantes de este Barça. Y lo que parece es que no puede ser titular ni en partidos grandes ni en partidos menores. La mejor solución sería tenerlo en el banquillo para momentos específicos o por partidos ya resueltos.
Pedri y De Jong aportan soluciones
Y se ha notado cuando ha habido bajas que es uno de los jugadores con peor rendimiento del equipo. Además, se puede decir sin miedo que es el centrocampista menos efectivo de este Barça, también por detrás de Fermín López, un joven que la temporada pasada jugaba como cedido en el Linares de 1ª RFEF.
Contra el Rayo Vallecano se pudo volver a ver sobre el césped dos jugadores clave como Pedri González y Frenkie de Jong, que maquillaron muchos de los problemas del Barça generados por Oriol Romeu. Los dos futbolistas que justo vuelven a recuperar el ritmo después de sus respectivas lesiones, supieron dar un paso adelante, pero les faltaba la ayuda del tercer centrocampista.
También quedó claro que cuando salió al campo Ilkay Gündogan y se marchó Oriol Romeu las cosas mejoraron considerablemente. Y ahora mismo el mediocentro catalán es más un problema que una solución en este Barça. Si no hay mejora, su nivel no es para jugar en el Barça.