Tadej Pogačar gana la penúltima etapa del Tour de Francia 2024. En la última jornada en línea, el esloveno no ha tenido piedad y se ha llevado su quinta victoria después de mantenerse al margen todo el día. 20 días de Tour, en una etapa de alta montaña, con tres puertos de gran entidad, las fuerzas escaseaban, pero las ganas estaban más vivas que nunca. En una tarde en la que Enric Mas y Richard Carapaz parecían tener la etapa controlada, la batalla por la segunda posición ha llevado a los favoritos hasta delante. Pogačar, dejando hacer a los otros, se ha mantenido en el primer grupo y ha esperado hasta el final para demostrar, una vez más, que va muy sobrado. 5 victorias de etapa y la general sentenciada: un Tour para disfrutar. Sin cambios en la general, todas las posiciones parecen sentenciadas antes de la última etapa.
El Tour ha llegado a su final con una etapa impresionante. Justo antes de la contrarreloj de mañana, que cerrará la edición 111 de la carrera, los ciclistas han tenido que sufrir los Alpes una última vez. 133 km entre Nice y el Col de la Couillole con 4 puertos de montaña, 3 de ellos de gran categoría. El Col de Turini, de 20,7 km, el Col de la Colmiane, de 7,5 km al 7,1%, y el final en alto en la Couillole: 15,7 km al 7,1%. Una jornada que, con la general sentenciada, parecía ideal para la escapada. Y todos los equipos eran conscientes. Viendo el rendimiento del líder, Tadej Pogačar, quien se había llevado 4 etapas hasta el momento, la fuga tenía que tener un gran nivel y una muy buena colaboración para evitar que les cogiera el gran grupo en el último ascenso. Por eso el ritmo ha sido trepidante desde el inicio para conseguir formar este grupo de élite que pudiera luchar la etapa sin preocuparse del esloveno.
Con un recorrido tan corto como el de hoy, la salida es un factor que decide cómo se afrontará el día. Empezar en subida siempre es un aliciente para atacar desde muy temprano, y eso mismo han pensado muchos de los ciclistas. Inicio agotador, con cambios de ritmo constantes de corredores de todos los equipos, que querían una última victoria y veían cómo se les acababa el tiempo. Han tenido que pasar el primer puerto, de segunda categoría, y 40 km para ver a los primeros ciclistas consolidados por delante del pelotón. Fuga de 10, entre los cuales estaban Richard Carapaz, que quería consolidar el maillot de la montaña (un hito que ha conseguido), Enric Mas, Wilko Kelderman, Romain Bardet y el catalán Marc Soler como integrantes más destacados. Con la presencia de Soler por delante, todo hacía pensar que el UAE de Pogačar no pondría ritmo en el gran grupo. Y así ha sido. Los protagonistas de hoy, los Soudal, para Remco Evenepoel.
Cuando la fuga ha llegado a los 4 minutos de margen, el equipo del tercer clasificado de la general ha empezado a aumentar la velocidad. Su objetivo, asaltar la segunda plaza de Vingegaard con Evenepoel y la cuarta de Almeida con Mikel Landa. Pocos según separaban a sus ciclistas de una posición más en la general. Y, con la contrarreloj de mañana, cada segundo que se pudiera recortar era bienvenido. El ascenso a la Colmiane ha supuesto un cambio en el grupo de delante. Viendo que el Soudal empezaba a recortar distancias, Jan Tratnik ha intentado mover la fuga, con éxito. A pesar de no ser el ciclista más peligroso, ha despertado al líder de la montaña, Richard Carapaz. El ecuatoriano ha puesto su marcha y ha estirado el grupo. Cuando parecía que Marc Soler sufría más, ha sorprendido a todo el mundo y ha lanzado un ataque que ha obligado Enric Mas a responder en primera persona. Este juego de ataques y descansos, sin embargo, no los beneficiaba, y el compás constante del pelotón seguía recortando segundos. Han coronado con 2 minutos y 51 segundos de margen.
Los últimos metros de ascenso han sido mucho más rápidos, sin embargo, con un Carapaz y un Enric Mas muy activos. El mallorquín ha mantenido la velocidad en el descenso para intentar dejar atrás el grupo, sin éxito. Han llegado todos juntos a una subida final que tenía que decidir la etapa. Si los escapados no empezaban a colaborar, la victoria estaría por detrás. Tratnik se ha encargado de trabajar para su líder, Kelderman, intentando descolgar al resto de los escapados. La primera víctima, Marc Soler. Con eso, Pogačar podía volver a soñar con la victoria de etapa. Por detrás, los Soudal estaban destrozando el pelotón, esperando el ataque de Evenepoel. A 11 km del final, Enric Mas lanzaba su apuesta final, y solo Carapaz reaccionaba. Los dos se marchaban hacia adelante, viendo cómo Bardet y Kelderman no conseguían entrar. El balear y el ecuatoriano eran muy superiores y parecía que la etapa podría estar ahí. Quedaban todavía 8 km y el grupo de los favoritos contaba con solo 6 integrantes: los 5 primeros de la general y Matteo Jorgenson, noveno. Mikel Landa ponía el ritmo y seguía recortando tiempo. Un minuto y medio para los dos primeros de la etapa.
A 7 km ha lanzado el ataque Evenepoel, pero no ha conseguido descolgar a nadie y ha decidido detenerse. Guerra de ataques entre Mas y Carapaz por delante, haciéndose daño pero aguantando, apretando los dientes. A 5 km de la meta, desastre para Remco. Después de trabajar todo el día para desgastar a Vingegaard, el danés ha sido más fuerte y se ha marchado adelante con Pogačar. Y con este cambio de ritmo, los dos líderes de la general llegaban a los dos primeros para jugarse la etapa. Carapaz ha aguantado en el grupo, conocedor de su punta de velocidad, mientras que Enric se ha soltado inmediatamente. Pero pocos metros ha podido compartir con ellos delante del ritmo de Vingegaard. Esprint a dos una vez más: Pogačar, con el Tour sentenciado, no ha dejado escapar una nueva victoria de etapa. Un ataque a 150 metros del final ha sido suficiente para destrozar el danés, que por un momento ha soñado con un nuevo triunfo.