La Superliga europea vuelve a escena y con más fuerza que nunca. Barça, Real Madrid y Juventus, los 3 clubes promotores de la nueva competición, han estado trabajando los últimos meses en mejorar el proyecto inicial, hasta lograr que los clubes que se apartaron tras dar el sí inicial se hayan sumado de nuevo. De hecho, algunas fuentes apuntan a que la nueva Superliga no es todavía oficial porque se quiere evitar el error de la primera vez y se está a la espera de llegar a un acuerdo con los equipos alemanes, pues con Bayern de Múnich y Borussia Dortmund su potencial sería todavía mucho mayor.

"La Superliga no ha fallado. En mi opinión, el fútbol europeo necesita urgentemente reformas", ha afirmado este jueves Andrea Agnelli, presidente de la Juventus, durante el Business of Football Summit, un evento organizado por Financial Times y centrado en el futuro del negocio del fútbol. "La Superliga es un trabajo conjunto de 12 clubes, no de una sola persona. 12 clubes firmaron un contrato de 120 páginas y 11 de ellos todavía siguen vinculados", ha añadido. Agnelli, que se ha negado a valorar las desafortunadas declaraciones de Javier Tebas, ha ido más allá. "La UEFA es un organismo regulador, monopolista y guardián. Sabían que yo como presidente de la Juventus estaba trabajando en algo diferente".

Andrea Agnelli, presidente de la Juventus / EFE

Dos ligas abiertas, con ascensos y descensos

Tal y como informa este jueves el diario Marca, la nueva Superliga huye del formato inicial, pues no tendrá miembros permanentes y la clasificación para disputarla dependerá del resultado obtenido en las ligas domésticas. Habrá, pues, ascensos y descensos, y dos categorías diferentes, como si fueran la Champions League y la Europa League. Los promotores de la Superliga no piensan asumir las reglas de la UEFA, sino las de la Unión Europea, por lo que se quiere implementar un exhaustivo control económico de los equipos participantes. 

En todo este tiempo, los equipos fundadores de la Superliga han estado trabajando para lograr la adhesión de clubes de otros países para presentar el proyecto más inclusivo posible y, de este modo, alejarse de la idea inicial, cuando muchas críticas vinieron porque daba la sensación que los grandes clubes querían formar un club de ricos.​

Aleksander Ceferin, presidente de la UEFA / EFE

Ceferin vuelve a la carga

Viendo como el tema de la Superliga volvía al primer plano mediático, y añadiendo los cambios que en un primer momento usaron sus contrarios para criticarla, Aleksander Ceferin, presidente de la UEFA, ha vuelto a la carga contra los promotores de la Superliga, a los que ha acusado de usar la guerra entre Rusia y Ucrania. "Primero aprovecharon la pandemia y ahora intentan sacar partido de una guerra. Nuestra idea no ha cambiado lo más mínimo", ha afirmado Ceferin en el Football Business Summit organizado por el Financial Times.

El presidente de la UEFA no se ha quedado ahí, pues ha amenazado a todos los equipos que participen en la Superliga de ser expulsados de todas las competiciones que organiza la UEFA. "Hablar sobre la Superliga no es hablar sobre fútbol. No podemos impedir que algunos clubes europeos jueguen su competición, pero a ninguno de ellos se le permitiría volver a la UEFA ni disputar sus torneos".

 

Imagen principal: La Superliga de fútbol coge impulso con un nuevo formato mucho más atrayente / Europa Press