Ha sido un año increíble para los intereses de Aston Martin. Fernando Alonso ha sido la gran noticia de los británicos, cuando llegó, por sorpresa, seducido por el proyecto de futuro de Lawrence Stroll. El resto es historia. Ni en los mejores sueños de la marca verde, ni del piloto ovetense, se habían imaginado cosechar unos resultados como los obtenidos a final de temporada. Si bien es cierto que el tramo final del AMR23 dejó mucho que desear, en el conjunto global, el monoplaza del equipo inglés rindió a un gran nivel, sobre todo pilotado por el bicampeón del mundo.
Con él, el asturiano consiguió subirse al podio en ocho ocasiones, rozando la gesta de desbancar a un intratable Max Verstappen, sobre todo en Mónaco, primero en una qualy de infarto y después con una mala de decisión de neumáticos en carrera, que le privó de alcanzar la gloria, y la tan anhelada 33. Esa ha sido la gran cuenta pendiente de Aston Martin y de Fernando, poder conseguir, al menos, una victoria para poner el broche de oro a un mundial para el recuerdo.
Fernando Alonso, ilusionado con el AMR24
En el equipo de Lawrence Stroll están decididos a seguir creciendo a pasos agigantados. Esta temporada han dado un gran salto en la clasificación de constructores, pasando del séptimo puesto al quinto, lo cual significa, también, una inyección superior a nivel económico para los intereses de Aston Martin. No obstante, como dijo el dueño del equipo, no quieren quedarse ahí, y seguirán avanzando para situar a la escudería en lo más alto de la tabla.
Como agradecimiento, también, al gran rendimiento que está dando Fernando Alonso a bordo de su monoplaza, en la marca del magnate canadiense ya trabajan para presentar al "hermano pequeño" del AMR23. Un coche muy avanzado y que sea capaz de competir en cualquier circuito, uno de los grandes 'debes' del antiguo bólido del ovetense, además de su falta de velocidad punta en las rectas, que le hacía perder mucho ritmo.
El piloto de 42 años, ahora, quiere mucho más, y en Silverstone ya trabajan de lo lindo para que así sea. Fernando confía en que la escudería escuche sus exigencias para elevar el nivel del monoplaza y que esté a la altura de su calidad y de su magia, que le permite hacer maniobras imposibles.
El alerón, clave en el nuevo monoplaza de Aston Martin
El 29 de febrero, en Baréin, más allá de las posibles evoluciones que vayan llegando durante el transcurso de la temporada, se medirá el trabajo de los ingenieros de Aston Martin. Antes, eso sí, se presentará el AMR24. Será el 12 de febrero, un día antes que Ferrari, y dos antes de McLaren y Mercedes.
Por el momento, a expensas de ver su rendimiento en pista, desde el equipo verde aseguran que el nuevo monoplaza será mucho más eficiente que el actual, en el cual los alerones traseros serán la auténtica clave. "Estamos intentando crear un coche que se pueda pilotar en todos los circuitos y simplemente cambiando el alerón trasero o el delantero para ser más fuerte", dijo Tom McCullough, jefe de rendimiento de Aston Martin. Un desarrollo que podría permitir a Fernando Alonso lograr la 33, y alguna más.