El Barça está luchando como puede durante estos meses que está jugando en Montjuïc. El Estadi Olímpic Lluís Companys es majestuoso, pero no tiene ninguna comparación con el Camp Nou y con el nuevo estadio que está previsto que reabra a finales de este 2024. Y es que esta nueva casa del barcelonismo será una maravilla en muchos sentidos y tendrá hasta siete aspectos destacados respecto a la anterior versión.
Ya se puede decir sin miedo a equivocarse que el nuevo Camp Nou será el mejor estadio de España, estará en el podio a nivel europeo y no tendrá nada que envidiar a ningún otro a nivel mundial. Pero también es verdad que todos los avances que se introducirán serán para el bien del espectáculo y para el bien de los seguidores que vayan a ver en directo el espectáculo del fútbol.
Las mejoras del nuevo Camp Nou
A nivel estético y que se comprobará a primera vista hay que destacar tres aspectos importantes. El primero de todos será el aumento de la capacidad, llegando a los 104.600 espectadores, y la nueva cubierta que dejará a todos los aficionados sin peligro de mojarse en caso de lluvia. Pero es que también será gracias a la tercera grada, que ya no será asimétrica y permitirá este aumento de espectadores y una mejora a nivel visual. Y eso también significa que aumentarán las localidades VIP, pasando de los 2.200 asientos a los 7.000. Esto quiere decir que económicamente se dará un gran salto.
Pero esto no será todo, ya que a la hora de acceder al estadio habrá más facilidades. En primer lugar, el nuevo Camp Nou estará abierto al barrio de Les Corts y no se verán barreras para acceder. Y, en segundo lugar, los accesos a las localidades serán más adaptados a todas las necesidades, con nuevos ascensores y escaleras mecánicas que ayudarán a la movilidad interna. Y también habrá que destacar que en el aspecto de la comodidad habrá un grado más confort, con asientos nuevos y más amplios.
Todo esto irá acompañado de un proyecto que mira al futuro. Y es por eso que el Barça ha apostado por este nuevo estadio más sostenible, que tendrá una gran bajada del gasto energético con respecto al anterior Camp Nou. E irá acompañado de un plan de movilidad más adaptado a las necesidades de la ciudad de Barcelona, con más transporte público y una idea de no detenerse aquí.
Cuenta atrás para el nuevo Camp Nou
Pero todo esto todavía no se puede comprobar porque el nuevo estadio culé todavía no se ha acabado de construir. En los próximos meses continuará el trabajo y se espera que el próximo mes de noviembre ya se hayan acabado la primera gran parte de las obras y que se haga la inauguración oficial.
Sin embargo, desde el Barça saben que las obras van para largo y que el nuevo Camp Nou todavía tardará unos años más en completarse. La remodelación va para largo y a fases. De momento, el ritmo es bueno.