Hace más de 10 meses que no se viste la camiseta del Lille. Se sabe muy poca información de él. Ni el club ni el mismo futbolista dan explicaciones sobre su inactividad. El último comunicado oficial que consta de la entidad del norte de Francia es del pasado mes de agosto, informando que se le había efectuado una pequeña intervención en una rodilla izquierda que a lo largo de su carrera ha sufrido mucho. Y ahora, su retirada está sobre la mesa, con solo 31 años y todavía en un club de las cinco grandes ligas europeas.
El calvario de Samuel Umtiti con su rodilla izquierda
Estamos hablando de Samuel Umtiti, un futbolista que en su etapa en el Barça demostró ser uno de los mejores centrales del mundo, pero que acabó siendo un ejemplo del clásico jugador excesivamente castigado por las lesiones. El 2024 del jugador francés ha sido para olvidar, acumulando 340 días sin jugar a fútbol. El problema, de nuevo su rodilla izquierda, que lastró su rendimiento justo cuando firmó una renovación millonaria con la entidad blaugrana, que lo veía como un central para dominar Europa durante la próxima década.
La junta presidida por Josep Maria Bartomeu decidió poner toda la carne sobre la parrilla a la hora de blindar a un Samuel Umtiti que, con una cláusula de solo 60 millones de euros, era una oportunidad de oro para cualquier club europeo. Parecía un movimiento acertado en toda regla, pero solo unos meses más tarde de firmar su nuevo contrato, empezó una pesadilla que todavía no se ha acabado. A punto de acabar la 2017/18 aparecieron los primeros problemas en la rodilla izquierda y, desobedeciendo los consejos de los servicios médicos culés, decidió arriesgar para jugar el Mundial de Rusia 2018, descartando la intervención quirúrgica y apostando por tratamientos conversadores. Durante aquel verano tocó el cielo del fútbol, pero el precio a pagar fue un descenso al infierno que podría acabarse de aquí a poco con la peor noticia posible: una retirada con solo 31 años.
Un descenso a los infiernos que podría acabar en retirada
Y es que, según han informado varios medios franceses, esta posibilidad no es iracunda. Umtiti ya no tiene las condiciones físicas necesarias para rendir al máximo nivel y podría dejar el fútbol profesional durante este próximo 2025. Es cierto que en este largo intervalo de tiempo encontró un oasis de esperanza en Italia, concretamente en Lecce, donde vivió una temporada sin problemas físicos, recuperando parte del nivel que mostró en Barcelona. Sin embargo, este curso fue solo un espejismo.
Después de su aventura en Italia, volvió a su casa, Francia, donde en lugar de tener un final de carrera plácido, ha revivido el calvario con su rodilla izquierda. El récord que hay en Barcelona de Umtiti es agridulce: por un lado, fue uno de los mejores defensores del mundo vistiendo de blaugrana; por otro, acabó siendo una losa, que, con su salario de 10 millones limpios anuales, perjudicó de forma aguda la economía del club, todavía estropeada. Ahora, con 31 años, la rodilla del exfutbolista del Barça ya casi ha dicho basta.