Uno de los grandes culebrones de las últimas semanas de la Fórmula 1, el futuro de Carlos Sainz, ha llegado a su final. El actual piloto de Ferrari correrá las 2 próximas temporadas en Williams, un equipo histórico venido a menos que aspira a volver a los viejos y gloriosos tiempos de la mano de Sainz. El piloto madrileño, al que Ferrari le abrió las puertas de salida justo antes de empezar la actual temporada al anunciar el fichaje de Lewis Hamilton, apostó por la calma, a no precipitarse, por lo que en las últimas semanas ha valorado todas las opciones que tenía encima de la mesa, hasta decantarse por Williams. "Estoy muy contento de anunciar que me uniré a Williams Racing a partir de 2025. No es ningún secreto que el mercado de pilotos de este año ha sido excepcionalmente complejo por varias razones y que me ha llevado algún tiempo anunciar mi decisión. Sin embargo, estoy completamente seguro de que Williams es el lugar adecuado para que continúe mi viaje en la F1 y estoy muy orgulloso de unirme a un equipo tan histórico y exitoso, donde muchos de mis héroes de la infancia corrieron en el pasado y dejaron su huella en nuestro deporte", ha afirmado Carlos Sainz tras el anuncio.

Todo se empezó a precipitar en pasado viernes, cuando el padre de Carlos Sainz y el mánager del piloto, Carlos Oñoro, se reunieron con los dirigentes de Williams en Spa. Poco después, desde el equipo británico filtraban que la operación estaba al 50%. "Sería un orgullo y un placer para un equipo como el nuestro tener un piloto como Carlos", afirmó James Vowles, jefe de Williams, que al final ha logrado convencer al piloto madrileño.

De Red Bull a Audi y Alpine

Antes de decantarse por Williams, Carlos Sainz valoró las diferentes opciones que le surgieron para seguir compitiendo en la Fórmula 1, una vez tuvo claro que Ferrari apostaba por la dupla Hamilton-Leclerc para el futuro. La primera opción que se planteó fue la de Red Bull, por los rumores de que la escudería austriaca iba a prescindir de Sergio Pérez. Poco a poco, sin embargo, esta opción se fue diluyendo y surgió con fuerza el plan de que Carlos Sainz fuera el líder de la futura escudería Audi, justamente el equipo con el que su padre compite en el Rally Dakar.

A pesar de que el proyecto de Audi es atrayente, no deja de ser una apuesta arriesgada y de futuro, por lo que Sainz lo acabó desestimando. También tuvo encima de la mesa la posibilidad de fichar por Alpine, con la insistencia de Flavio Briatore, aunque ya entonces las conversaciones con Williams estaban avanzadas.

Williams quiere recuperar la gloria 

Con 9 Mundiales de Constructores y 7 de pilotos, Williams es una de las grandes leyendas de la Fórmula 1. Por la escudería británica han pasado estrellas del nivel de Nigel Mansell, Damon Hill, Nelson Piquet, Alain ProstJacques Villeneuve, el último piloto que logró el Mundial de la Fórmula 1 con Williams, en 1997. Desde entonces ha llovido mucho y Williams no ha vuelto a tocar la gloria, pasando a ser una escudería de la zona media baja de la parrilla. 

Con motores Mercedes, James Vomles al mando y Carlos Sainz como jefe de filas, Williams espera estar en la zona alta a partir de la próxima temporada, un proyecto tan complicado como ambicioso. "He hablado con mil ingenieros y es una lotería lo de 2026... pero ojo que 2025 vale lo mismo", afirmó recientemente Sainz, que ya estaba dando pistas sobre su futuro. El elegido ha sido Williams.