El Real Madrid quiere blindar a una de las piezas clave del equipo. Porque Eduardo Camavinga ha dado el paso al frente que se esperaba de él cuando comenzó la temporada, y ha logrado consolidarse como titular indiscutible, independientemente de la posición donde le toque jugar. Ahora mismo, es impensable que Carlo Ancelotti lo deje en el banquillo, y ha explotado todo el potencial que se le veía. Lógico que haya llamado la atención de otros clubes.
Y es que en los últimos meses se ha especulado con un fuerte interés por parte de Manchester City, Bayern de Múnich o Manchester United, que siguen muy de cerca al internacional francés desde que solamente era una joven promesa sin prácticamente experiencia en la élite. Se mostraban dispuestos a hacer una inversión importante, que se acercara a los 100 millones de euros, para intentar llevarse al ‘12’ del Santiago Bernabéu.
No obstante, Florentino Pérez no tiene ni la más mínima intención en negociar por un crack que considera fundamental tanto en los planes de presente, como sobre todo de futuro. Ve en el ex del Stade Rennais a un futbolista capaz de marcar una época y de convertirse en una leyenda de la institución, y por ello no se sentará a negociar con nadie. De hecho, ya hay una reunión programada con el crack de 20 años y con su representante, para que firme un nuevo contrato.
Aunque el actual vínculo que tiene se extiende hasta el lejano 2027, y tiene una cláusula de rescisión prohibitiva, el Madrid quiere recompensar a Camavinga ofreciéndole un salario más elevado, y subiendo todavía más su precio de salida. Actualmente, es uno de los peores pagados de la plantilla, con un salario de cuatro ‘kilos’ netos al año, una cifra que se elevará hasta alcanzar los seis.
De esta forma, quieren acabar con todos los rumores, y sacar al galo del mercado. No se moverá, ni en este verano, ni tampoco en los siguientes.
Camavinga, el salvavidas de Ancelotti
Camavinga ha hecho méritos de sobra para ser considerado como un valor fundamental para el Madrid, gracias al nivel y a la regularidad que ha demostrado. Además, se ha convertido en el salvavidas de Ancelotti, debido a que ha actuado en múltiples posiciones sin rechistar.
Donde más cómodo se encuentra sobre el terreno de juego es como pivote defensivo, pero tampoco tiene problemas a la hora de actuar como interior, o incluso, como lateral zurdo, que es en el rol que más está jugando recientemente.