Netflix se frota las manos. Y es que el culebrón protagonizado por la RFEF y la gran mayoría de las jugadoras de la selección española sigue acumulando capítulos, y con la trama cada vez más compleja. De hecho, cada vez se adapta mejor a la situación el tópico de que la realidad está superando a la ficción. Tal y como adelantan El Periódico de Catalunya y La Vanguardia, Montse Tomé, la nueva seleccionadora española, ha convocado a 15 campeonas del mundo, además de Mapi León y Patri Guijarro, sin consultárselo antes, un órdago en toda regla que todavía tensa más la cuerda.
Después de que se cancelara la comparecencia del viernes de Montse Tomé por el comunicado firmado por 39 jugadoras en el que renunciaban a jugar con la selección española, la expectación era máxima para este lunes, en el que estaba previsto que Tomé diera la lista de convocadas para la disputa de la Nations League. Se daba por hecho que la lista la iban a formar otras jugadoras, por lo que ha sido sorprendente ver que en el listado aparecían 20 jugadoras de las 39 firmantes. Además, Jenni Hermoso no estaba.
Una convocatoria envenenada
En un primer momento, por las respuestas de Montse Tomé, se daba por hecho que la RFEF había llegado a un acuerdo de mínimos con las jugadoras, una teoría acompañada por el comunicado previo de la RFEF, en el que se comprometía a resolver el conflicto con las jugadoras, a llevar a cabo cambios, aunque sin concretar cuáles y cuándo. A medida que ha ido avanzando la rueda de prensa, no terminaba de quedar clara la situación, ya que las respuestas de Montse Tomé eran ambiguas, sin entrar en detalles.
Todo ha saltado por los aires en la última respuesta, cuando se le ha pedido a la seleccionadora que concretara si había hablado o no con las jugadoras. "Yo confío en que las jugadoras son profesionales. Vienen de ser campeonas. Aman la profesión, estar en la selección es un privilegio", ha afirmado Tomé. ¿Había hablado o no con las jugadoras?
Las jugadoras se enteran por la televisión
Ha sido entonces cuando ha ido circulando el rumor de que la convocatoria de Montse Tomé no había sido la constatación de una pipa de la paz entre RFEF y jugadoras, sino un órdago en toda regla. Tal y como han adelantado El Periódico y La Vanguardia, las jugadoras convocadas no tenían constancia de que las iban a convocar. No había acuerdo, por lo que daban por hecho que no iban a ser citadas por Montse Tomé después del rotundo comunicado del viernes. Las jugadoras se han enterado por televisión. Un esperpento mayúsculo.
Ahora está por ver qué ocurre este martes, cuando las 23 jugadores convocadas deben presentarse en Las Rozas, para ponerse a disposición de la nueva seleccionadora. En el caso de no ir, se exponen a una dura sanción, aunque lo que pueda suceder es un Expediente X, ya que no existen precedentes. El culebrón está más abierto que nunca. Netflix se frota las manos.