Oriol Romeu no lleva demasiado tiempo como nuevo futbolista del FC Barcelona, pero desde su llegada - o más bien su regreso a casa - está sufriendo la presión de convertirse en jugador del Barça. Su fichaje, sin haber disputado ni un solo minuto todavía, fue muy criticado por la afición blaugrana y desde algunos sectores dentro del club, a pesar de haber realizado una gran temporada en el Girona, donde se convirtió en una de las piezas indiscutibles en el 11 titular de Michel.

No obstante, con la llamada del club culé - la que fue su casa durante mucho tiempo - y ante el pago de la totalidad de la cláusula, el pivote de Ulldecona no dudó en hacer las maletas y trasladarse de Girona hacia la ciudad Condal, donde sabía que iba a tener un rol muy diferente. Y, a pesar de que pareció iniciar con muy buen pie la pretemporada, la situación ha ido empeorando hasta el punto de haber desaparecido de los esquemas de Xavi Hernández, aun a falta de un perfil puro como él en la plantilla.

Xavi Hernández dando indicaciones / Foto: EFE

Oriol Romeu rinde por debajo de lo esperado

Y es que, después de lo visto en Montilivi, desde el conjunto catalán esperaban que diera mucho mejor rendimiento. No solo por su indudable calidad y sus características, sino por su veteranía y experiencia en LaLiga. Pero, la sombra de Sergio Busquets - a quien vino a sustituir Romeu - es demasiado alargada y las comparaciones, odiosas.

El pivote no está aportando la solidez necesaria en defensa ni la clarividencia idónea en la salida de pelota que necesita un equipo como el Barça por su estilo de juego. Muchos ya se cuestionaron la llegada del de Ulldecona a la ciudad Condal, pero ahora, viendo sus últimas actuaciones como titular, parece que no hay lugar a dudas, no está rindiendo al mismo nivel que sus compañeros.

Oriol Romeu en rueda de prensa con el Barça / Foto: EFE

Oriol Romeu, la última opción

Lo cierto es que el fichaje de Oriol Romeu fue un intento a la desesperada por cubrir una posición que quedaba huérfana tras la mencionada salida de Busquets. Recordemos que el pivote catalán fue la última opción de un FC Barcelona que tenía por delante de él a varios nombres, no obstante, la maltrecha economía del club obligó a Joan Laporta a desechar todas las opciones e irse a por la low cost.

Ni Joshua Kimmich, ni Martín Zubimendi - el favorito de Xavi Hernández - ni siquiera Marcelo Brozovic pudieron concretar su llegada a Barcelona, por lo que el Barça tuvo que conformarse con Romeu. El pivote está atravesando un mal momento y si no mejora el rendimiento, veremos como evoluciona su situación.