El Barça se rebela ante Osasuna (1-2) en un partido muy sufrido y en el cual ha tenido que remontar con un futbolista menos después de la expulsión de Robert Lewandowski a la media hora de partido. Los goles de Pedri González y de Raphinha han sido clave para que el Barça se marche como líder de la Liga Santander al parón del Mundial de Qatar.

Todo mal para el Barça: inferior, gol en contra y expulsión de Lewandowski

La presión y las ganas del Mundial de Qatar (o de las vacaciones) han traicionado al Barça. A pesar de alinear el mismo once que el día de la exhibición contra el Almería, solo cambiando a Gerard Piqué por Andreas Christensen, los blaugrana han sido demasiado diferentes. Más que nada ha sido por la incomodidad del rival, un Osasuna que está sorprendiendo a todo el mundo esta temporada.

Desde el primer minuto que la presión y el protagonismo era navarro. El Barça, ahogado desde la posición de Marc-André ter Stegen y hasta Lewandowski, no se ha encontrado nada cómodo sobre el césped. Y después de algunos avisos iniciales de Osasuna, ha llegado el gol del conjunto local gracias a David García, rematando solo un córner de cabeza, y también gracias al arbitraje, que no ha querido ver cómo anulaban a Marcos Alonso de la jugada con una falta más que punible.

Los jugadores de Osasuna celebrando su gol contra el Barça / Foto: EFE

El Barça, desolado en El Sadar por el marcador en contra y por un Osasuna superior, no ha podido imponer su fútbol. Osasuna superaba a los blaugrana en todos los aspectos del juego. Ni Ousmane Dembélé tenía el día, ni Robert Lewandowski podía amenazar, ni Ferran Torres estaba fino, ni ninguno de los centrocampistas parecía acertado. Y Sergio Busquets, un peldaño por debajo de Pedri González y de Frenkie de Jong, perdiendo balones constantemente.

Y cuando mejor estaba el Barça, aunque todavía era inferior a Osasuna, Lewandowski se ha autoexpulsado. En el minuto 30, segunda tarjeta amarilla para el delantero polaco, muy justa, después de lanzarse sobre un rival con el balón ya fuera de la zona. Y el Barça ha tenido que combatir contra un gran Osasuna, contra el arbitraje y contra la inferioridad numérica. Pintaban bastos para los culés. Y un gol anulado a Ferran Torres, por un claro fuera de juego, ha acabado de encender a los jugadores del Barça antes del descanso.

Los jugadores del Barça quejándose después de la expulsión de Robert Lewandowski / Foto: EFE

La remontada inesperada del Barça

El Barça, muy caliente por el arbitraje, se ha quedado con otro futbolista menos al descanso, ya que Gerard Piqué, en el día de su retirada del fútbol, se las ha tenido con el árbitro Jesús Gil Manzano en el túnel de vestuarios y el colegiado principal lo ha expulsado. Pero con esta rabia el Barça ha arrancado el segundo tiempo y ha conseguido el gol del empate en el minuto 47. Pedri ha aprovechado un mal rechace de la defensa local y ha puesto el balón al fondo de la portería.

Pero el Barça, con un futbolista menos, le ha costado mucho generar. Osasuna ha sabido jugar muy bien en ataque y evitar riesgos innecesarios en defensa. Alguna carrera de un muy buen Balde y algún ataque fallido de Dembélé, hasta que a falta de un cuarto de hora para el final han entrado al campo Pablo Gavi, Raphinha y Ansu Fati.

Pedri González celebrando su gol contra Osasuna / Foto: EFE

Y entonces, en una jugada aislada en el minuto 85, De Jong ha hecho una asistencia al espacio extraordinaria y Raphinha ha hecho un golazo de vaselina con la cabeza. Entonces el joven defensa culé Chadi Riad ha hecho acto de presencia para intentar sobrevivir. Y el Barça ha conseguido lo imposible y trabajándoselo mucho. Una victoria importantísima contra Osasuna que permite a los culés marcharse al parón por el Mundial de Qatar con el liderazgo de la Liga Santander.