Joan Laporta mantiene viva la esperanza de que Leo Messi pueda despedirse del Barça como la leyenda que es. El verano pasado, al presidente blaugrana no le quedó más remedio que permitir la salida del argentino, pues la situación económica del club, unida a los intentos de Javier Tebas de que el Barça firmara con CVC para desactivar el plan de la Superliga, obligó al Barça a renunciar a la renovación de Leo Messi.

La temporada del Barça ha sido un desastre, así como la de Messi en el PSG, por lo que hace unas semanas se indagó la manera de que el jugador regresara al Camp Nou. El gran problema fue que el París Saint-Germain se negó a dejarle salir, además de que tampoco era seguro que el club blaugrana le pudiera inscribir por la Fair Play financiero de LaLiga, por lo que el sueño no tardó en desvanecerse.

Laporta, junto a Piqué, Messi, Busquets y Sergi Roberto / FC Barcelona

Messi, ¿al Barça en el 2023?

Ahora, en cambio, se ha abierto una nueva vía. Leo Messi termina contrato con el PSG el 30 de junio del 2023, momento en el que Joan Laporta espera que la situación financiera del Barça haya mejorado considerablemente. El plan es que sea en ese momento cuando el argentino fiche por el Barça, para una temporada, para poder despedirse de la afición como se merece. Xavi Hernández estaría encantado, pues sabe todo lo que Messi le podría aportar a la hora de implantar su estilo de juego.

El gran problema es que Leo Messi querría que en ese momento un jugador de la actual plantilla del Barça ya no estuviera en ella. Se trata de Gerard Piqué, con el que el jugador ya hace meses que rompió toda relación. En su etapa conjunta se respetaban, como dos leyendas del club que se conocen desde hace tiempo, pero con la salida del argentino todo se acabó por romper. Los rumores sobre que Piqué no dudó en recomendarle a Laporta la salida de Messi no piensan ser perdonados por el jugador, que ya no quiere saber nada del central. Ya no le invitó a su cena de despedida y si volviera al Barça, no querría volver a coincidir con él.

Leo Messi, tras un gol del París Saint-Germain / EFE

El Mundial marcará el camino

El otro gran inconveniente es que fichar por el Barça en el 2023 rompería el plan que la familia Messi hace tiempo que tiene en mente, la de irse a los Estados Unidos tras el Mundial de Qatar 2022. El argentino lleva tiempo con la cita mundialista entre ceja y ceja, la última oportunidad que tiene de llevar a la albiceleste hasta el título y de engrandecer todavía más su leyenda. Acabada la temporada, la idea es fichar por el Inter de Miami, jugar allí una o dos temporadas y entonces colgar las botas.

En el caso de fichar por el Barça, Messi debería estar una temporada más concentrado al 100% en la máxima competición. Todo dependerá de su motivación para seguir en la élite. Si se ve bien física y mentalmente, no lo descarta. Si ve que ya no puede aportar lo que él considera un mínimo necesario, renunciará a volver a ponerse la camiseta del Barça.

 

Imagen principal: Leo Messi, en un partido del París Saint-Germain / Europa Press