Dos veces campeón de la NBA, tres veces campeón de Conferencia, seis veces All-Star, dos veces campeón de la ACB y una de la Copa del Rey, subcampeón en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008 y Londres 2012, ganador de un Mundial y tres Eurobaskets, premio al rookie del año, tercer máximo anotador europeo de los play-offs de la NBA, máximo taponador europeo de la fase regular y de los play-offs, dos veces mejor jugador europeo FIBA, premio Princesa de Astúrias de los Deportes e incluso abanderado de España. El currículum de Pau Gasol es impecable y lo convierte en uno de los mejores deportistas de la historia del país. Pero Pau Gasol –ídolo, leyenda y equidistante crónico– está a punto de celebrar su cuadragésimo aniversario.
Este martes, el pívot de Sant Boi de Llobregat recordó por enésima vez que valora retirarse en el Barça. Y lo hizo, de nuevo, dejando bien claro que el club blaugrana no es su prioridad: "Acabar en los Lakers o en el Barça es atractivo. Si hay opción de volver a la NBA, volveré, si no vendré a Europa, y en este caso el Barça es el que tiene más sentido", dijo alegremente. El pasado mes de abril, tampoco escondió que volver al Palau le permitiría prepararse por los Juegos de Tokio de 2021. Mientras tanto, el Barça calla y, como de costumbre, se equivoca. ¿Quién dice que sea bienvenido?
FCB
Pau Gasol está a punto de cumplir cuarenta años y no disputa un partido oficial desde hace quince meses, en concreto desde el 10 de marzo del 2019. En las dos últimas temporadas ha pasado por tres equipos, los San Antonio Spurs, los Milwaukee Bucks y los Trail Blazers. Con la franquicia de Portland ni siquiera debutó y cuatro meses después del fichaje rescindió su contrato. Todo, por una fractura en el pie izquierdo que lo mantiene en el limbo competitivo.
Gasol no es Nikola Mirotic ni Àlex Abrines. El montenegrino, en plena madurez y consolidado como una de las figuras destacadas del campeonato norteamericano, decidió volver a Europa para dominar el continente y ser el genio y figura del Barça. El segundo, con sólo veintiséis años en sus hombros, necesitaba recuperar la pasión por el baloncesto. De Gasol, en cambio, no se puede esperar ni un rendimiento excelso ni una trayectoria a corto o medio plazo. Por muy grande que haya sido, si el pie no responde en las pistas de los EE.UU. tampoco lo hará en Europa, donde las defensas, aunque quizás no lo recuerde, son tanto o más duras que en la NBA.
Embajador culé
Hay que recordar que actualmente Gasol es asesor estratégico y embajador global del Barça en los Estados Unidos y que su fundación además, colabora con la del club blaugrana desde el pasado mes de junio para combatir la obesidad infantil. Sólo él y el presidente Josep Maria Bartomeu saben si las sinergias en los despachos también podrían acabar reflejándosese sobre la pista.