La catalana Paula Badosa ha firmado un grandísimo partido para superar a la checa Petra Kvitova (7-5, 7-6) en dos sets largos y trabajados que consolidan a la de Begur como una firme candidata en esta edición de Wimbledon. De momento, ya está en los octavos de final, entre las dieciséis mejores.
El partido empieza mal para Badosa
Antes que empezara el partido, se hacía prácticamente imposible pronosticar cuál de las dos era la favorita. Porque la catalana, número 4 del mundo, había superado con solvencia las dos primeras rondas, aunque contra rivales poco exigentes, mientras que la checa, actual número 26, es una doble ganadora de Wimbledon, lo que la convierte, siempre, en una candidata a volver a ganar el Grand Slam británic.
Y cuando han empezado los golpes, quien parecía llevar el partido a su terreno era Kvitova. Un break inicial y un juego en blanco para consolidarlo ponían a un 2-0 inicial y traspasaba toda la presión a Paula Badosa, a quien no le ha temblado la muñeca. Ha empezado a aumentar la confianza, y manteniendo los servicios con relativa solvencia, mientras Kvitova siempre lo hacía teniendo que salvar alguna posibilidad de rotura de la de Begur.
Badosa recupera el break en el momento decisivo
Badosa se lo dejaba todo para recuperar el break en contra, y en la última posibilidad, con 5-4 en contra y Kvitova sirviendo para ganar el primer set, lo ha conseguido. En la séptima bola de rotura, Badosa ha podido recuperar el break y ha acabado el primer set ganando los últimos cuatro juegos para poner el 7-5 final.
La madurez de la tenista nacida en Manhattan pero criada desde bien pequeña en Catalunya se ha hecho evidente ante una de las grandes, y el segundo set ha vuelto a ser de poder poder. La lectura rápida de las estadísticas nos haría decir ambas se han mostrado sólidas al servicio y no han cedido ninguno, hasta llegar al tie break definitivo. Pero para llegar, Badosa ha tenido que salvar nueve posibilidades de rotura de Kvitova, que ella sí que dominaba el servicio y no le ha concedido ninguno.
Impone su juego en el tie break decisivo
Pero la catalana ha resistido bien a los latigazos de la bicampeona en las pistas de Wimbledon, y respondía con una gran virulencia, dando, las dos, un gran espectáculo, que, para añadirle más emoción, ha desembocado en el juego de desempate. Y a pesar de que la veterana es Kvitova, ha sido Badosa quien ha decidido a qué ritmo se jugaría.
Cuando ella servía, los puntos duraban poco y caían a su favor, y Kvitova se desesperaba con cada error, hasta que uno de estos errores, una bola que le ha salido demasiado larga, le ha servido a Badosa para poder cerrar un partido de un mérito enorme y que la sitúa, para aquellos que lo dudaban, como una de las grandes favoritas a ganar Wimbledon.
Y más todavía, cuando la polaca Iga Swiatek, número 1 del mundo, ha perdido contra la francesa Cornet, cosa que parecía imposible después de una racha de 37 victorias seguidas. El siguiente obstáculo de Badosa, en los octavos de final, es la rumana Simona Halep, que ya sabe lo que es ganador en Wimbledon. Lo hizo en el 2019, superando a Serena Williams.