El fútbol da muchas vueltas y uno de los ejemplos más claros de eso llega cuando los jóvenes de la cantera acaban triunfando en la élite en otros equipos. En este sentido, y aunque no era un futbolista desarrollado en La Fábrica, uno de los pupilos del Real Madrid que Carlo Ancelotti y Zinédine Zidane rechazaron en el año 2016 ha acabado por ser el paradigma.
Martin Ødegaard, futbolista por quien el Real Madrid apostó cuando tan solo tenía 15 años, estaba llamado a ser una de las próximas estrellas a nivel mundial después de demostrar un talento que lo hacía sobradamente superior en el fútbol noruego. No obstante, y después de innumerables cesiones fuera del Santiago Bernabéu con el fin de desarrollarse y labrarse un lugar en el once titular, el club decidió venderlo de manera definitiva al Arsenal por 35 millones de euros.
Martin Ødegaard ya es el mejor del Arsenal de Mikel Arteta
Remontándonos al año 2015, hay que mencionar que el Real Madrid hizo una inversión que no llegó a los 3 millones de euros para ficharlo. Por lo tanto, obtuvo un beneficio considerable por el noruego. Con todo, también es cierto que el club merengue no fue capaz de extraerle el máximo rendimiento y, paralelamente, el máximo provecho económico.
Hoy, Martin Ødegaard está valorado en 60 millones de euros, y es que es uno de los mejores futbolistas del actual líder de la Premier League. La trascendencia del mediapunta zurdo en el juego gunner es de una magnitud formidable y Mikel Arteta le encomiende que lo haga partiendo desde zonas del medio del campo.
Ahora, que tantas veces se ha hablado de que el Real Madrid está en busca de mediocampistas jóvenes para dar relevo a hombres como Toni Kroos o Luka Modric, se puede hablar de Martin Ødegaard como una mancha en el expediente de Florentino Pérez por culpa de las decisiones técnicas que en su día tomaron Carlo Ancelotti y Zinédine Zidane.
Florentino Pérez, en evidencia
Con Martin Ødegaard en un momento de forma espléndido en el Emirates Stadium y con contrato allí hasta el verano de 2025, cualquier entidad que quiera sacarlo del norte de Londres tendría que rascarse el bolsillo de lo lindo. El Arsenal nunca ha tasado su precio de mercado, pero a buen seguro que este se dispararía hasta los 100 millones de euros para vergüenza de Florentino Pérez, que seguro que habrá pensado que un poco más de paciencia no hubiera estado de más.