El Manchester City ha vivido su enésima noche negra de esta temporada. Aunque fueron capaces de adelantarse en el marcador con tres goles que parecían sentenciar el duelo correspondiente a la quinta jornada de la primera fase de la Champions League, el Feyenoord igualó el partido en los últimos 15 minutos (3-3) de forma inexplicable. Se trata del sexto partido consecutivo que el City no consigue ganar. Una racha de resultados sin precedentes en la carrera de Pep Guardiola como entrenador, que no da con la tecla para poder volver al camino del triunfo.
Pep Guardiola acabó desesperado en la banda
Y es que Guardiola acabó el duelo contra el Feyenoord completamente desesperado. El entrenador catalán no daba crédito ante el ridículo que estaba protagonizando su equipo, que regaló tres goles cuando la victoria ya parecía en el bolsillo. Su desesperación llegó a tal punto que se arañó constantemente la cabeza y la nariz, hasta quedar visiblemente malherido. Después del duelo, acudió a zona mixta y a rueda de prensa, donde continuaba con preocupantes heridas, y las imágenes se viralizaron rápidamente por las redes sociales.
De hecho, Pep Guardiola ha explicado los rasguños que tenía en su rostro, con un tono irónico: "Ha sido con mis dedos, con mis uñas, quería hacerme daño". Ante esta situación, no queda ningún tipo de duda en que el entrenador del Manchester City se encuentra en la situación más complicada de su carrera de entrenador, con respecto a resultados y estado anímico. La renovación que firmó recientemente no sirvió para nada de cara a poder reanimar un equipo que continúa en coma.
Pep Guardiola analiza el inexplicable empate contra el Feyenoord
Pero además de explicar este anecdótico hecho, Pep Guardiola ha querido analizar también la derrota de su equipo: "El partido estaba bien, con 3-0, jugábamos bien, después concedemos muchos goles porque en estos momentos no somos estables. Regalamos el primero y los otros y por eso es difícil".
Asimismo, también ha resumido la situación de los últimos partidos: "Hemos perdido muchos partidos últimamente, somos frágiles, necesitas una victoria, el partido era bueno para nuestra confianza, jugando a un gran nivel, pero pasa alguna cosa y estamos en problemas. No sé si es un problema mental. El primer gol no puede pasar, el segundo tampoco. Después de eso no sabemos qué pasa, estamos desesperados por ganar, por hacerlo bien, pero no".