El Manchester City ha vuelto a ganar, esta vez imponiéndose 3-2 al Fulham en el Etihad Stadium con goles de Kovacic (doblete) y Doku. A pesar de la importante victoria, uno de los temas más comentados no fue el resultado, sino una pancarta que capturó la atención de todos los presentes y de las redes sociales. Un mensaje directo al técnico catalán: "Volem que et quedis", acompañado por dos esteladas, dejando claro que la afición no quiere que Pep Guardiola se marche al final de la temporada.
El mensaje llega en un momento en el que Guardiola está siendo relacionado con otros proyectos, sobre todo con la selección inglesa, lo que ha generado una gran incertidumbre sobre su futuro en el City. Ante estos rumores, la afición ha tomado parte y quiere que su entrenador siga guiando a un equipo que, bajo su mando, ha alcanzado la gloria en Inglaterra y en Europa. Pero para que Guardiola considere quedarse, parece que hay una condición importante: reforzar la plantilla con dos fichajes de primer nivel que harían al City aún más fuerte.
Musiala y Rodrygo: los deseos de Guardiola
Si Guardiola debe quedarse, no será solo por el afecto de la afición o los resultados recientes. Pep ha dejado claro a la directiva del City que, para continuar, necesita ver un compromiso firme en el proyecto, y eso incluye dos fichajes estrella que podrían cambiar la dinámica del equipo. Los nombres que ha puesto sobre la mesa son dos de los jóvenes más prometedores del fútbol mundial: Jamal Musiala, del Bayern de Múnich, y Rodrygo, del Real Madrid.
Jamal Musiala, con solo 20 años, es uno de los jugadores más brillantes y con mayor proyección en Europa. Su capacidad para jugar entre líneas, su técnica y su inteligencia táctica lo convierten en una pieza que Guardiola ve encajando perfectamente en el esquema del City. No es un secreto que a Pep le gustan los futbolistas polivalentes, aquellos que pueden adaptarse a distintas posiciones y roles dentro del campo, y Musiala cumple todos esos requisitos. Su llegada implicaría una gran inversión, pero también una garantía de calidad para los próximos años.
Por otro lado, Rodrygo Goes, que actualmente forma parte del Real Madrid, es otro de los objetivos de Guardiola. A sus 22 años, el brasileño ya ha demostrado ser capaz de marcar la diferencia en los grandes escenarios, destacando especialmente en la Champions League. Su velocidad, habilidad en el uno contra uno y su capacidad para definir en momentos cruciales son cualidades que encajan perfectamente con el estilo ofensivo del City. El problema es que sacar a un jugador como Rodrygo del Madrid no será tarea fácil, y menos cuando el club blanco también cuenta con él como parte fundamental de su proyecto futuro.
Más de 200 millones en juego
La llegada de estos dos futbolistas al Etihad no será barata. Se estima que, entre ambos, el coste total podría superar los 200 millones de euros. Una cantidad importante, pero que para el City y, en especial, para su ambicioso propietario, no parece ser un impedimento si con ello aseguran la continuidad de Guardiola y el fortalecimiento de un equipo que aspira a seguir dominando tanto en la Premier League como en Europa.
La gran incógnita es si el Manchester City podrá convencer tanto al Bayern de Múnich como al Real Madrid para que dejen ir a dos de sus grandes promesas. Aunque el poder económico del club inglés es innegable, también habrá que ver la voluntad de los jugadores. Musiala está asentado en el Bayern, donde es una pieza clave, mientras que Rodrygo ha expresado en varias ocasiones su deseo de triunfar en el Madrid. Sin embargo, el atractivo de jugar bajo las órdenes de Guardiola y la posibilidad de convertirse en los nuevos líderes del City podría ser un factor determinante en sus decisiones.
Por el momento, la situación está en el aire. Pep Guardiola tiene sobre la mesa una oferta de renovación con el City y una propuesta de la selección inglesa que le permitiría cambiar el fútbol de clubes por el internacional. Pero parece claro que si el técnico catalán decide seguir en Manchester, no lo hará sin refuerzos de calidad que le permitan luchar por todos los títulos. La afición ha hablado y le ha pedido que se quede, y ahora será cuestión de la directiva cumplir con los deseos de Pep para asegurar que el City siga contando con uno de los mejores entrenadores del mundo.
El mensaje de Guardiola ha sido claro: si el City quiere que se quede, deben demostrar ambición. Y esa ambición se traduce en fichajes. Con Musiala y Rodrygo, el Manchester City no solo reforzaría su plantilla, sino que daría un golpe de efecto en el mercado que podría asegurarles seguir en la cima del fútbol europeo durante muchos años más. Ahora, todo está en manos de la directiva y de lo que ocurra en las próximas semanas.