El Barça trabaja a contrarreloj. El conjunto azulgrana tiene varios frentes abiertos y necesita cerrarlos lo más pronto posible si no quiere llevarse un susto. Y es que los jugadores a los que aspira el club catalán son Top. Y el resto de equipos de Europa no van a quedarse de brazos cruzados.
Deco y compañía deben apresurarse para cerrar, por ejemplo, el fichaje de Dani Olmo. El director deportivo del Barça ya se ha reunido varias veces con el agente del jugador, y la sintonía es buena. Pero el City anda al acecho y la operación se puede complicar si no se cierra más pronto que tarde.
Guardiola pide su fichaje
El jugador del RB Leipzig es muy del agrado de Pep, que ya ha hablado con la directiva del City para que se pongan manos a la obra. A Guardiola le encaja perfectamente en la posición de mediapunta, teniendo en cuenta que el futuro de Kevin De Bruyne es incierto y que el belga viene arrastrando problemas físicos durante meses.
En cuanto al dinero, el City no tiene problemas. Los ingleses pueden poner los 60 millones que pide el Leipzig a tocateja. Sin variables ni plazos. Algo que el Barça no se puede permitir y que tiene algo preocupados a los azulgranas.
Dani, de momento, apuesta por el Barça
La buena noticia para el Barcelona es que la voluntad del jugador sigue siendo la de recalar en la ciudad condal. Olmo quiere volver a la que fue su casa y estar cerca de su gente, y eso juega a favor de Deco y compañía. Pero es cierto que no va a esperar todo el verano para que se cierre la operación.
Olmo tiene varias opciones además del Barça, y la del City es la que más le llama la atención con diferencia por detrás de la de los culés. Poder recalar en el actual Manchester y bajo la tutela de Pep Guardiola es algo que muy pocos rechazarían.
El centrocampista se siente halagado del interés mostrado por el campeón de la Premier y no descarta nada. Pero su prioridad es el Barça.
La próxima semana, clave
Se espera que la operación se acelere a partir del próximo lunes. Deco sabe que el fichaje requiere cierta prisa y está poniendo toda la carne en el asador para que todo salga bien. La cuestión es encontrar una fórmula que encaje en la situación económica del club y que el Leipzig acepte.
De momento los acercamientos al club alemán no han tenido éxito, pero habrá más. Olmo ya ha dado el visto bueno a la operación, pero en el Camp Nou saben que la paciencia no es infinita y que el City se mueve con fuerza.