En el Real Madrid han generado una enorme sorpresa las últimas declaraciones de Raphael Varane. El central francés, que en abril cumple 30 años, ya piensa en su retirada y no descarta vestir de nuevo la camiseta del Real Madrid. Terminaré mi carrera o en el Madrid, o en el Manchester United, o en el Lens. Lo seguro es que no jugaré en otro club", ha afirmado Varane, que tiene claro que no piensa vestir ninguna otra camiseta diferente a las que ha defendido hasta ahora. "Desde los siete años juego al fútbol, así que inevitablemente hay un poco de aprensión, pero no de miedo. Como toda decisión importante en la vida, requiere una cuidadosa reflexión y se hará paso a paso", añadió en referencia a el momento de colgar las botas.
Lo cierto, sin embargo, es que Varane no tiene ninguna opción de volver al Real Madrid, club en el que estuvo prácticamente toda su carrera y del que salió por la puerta de atrás, por dinero y en un momento delicado, pues se acababa de anunciar la salida de Sergio Ramos. El francés tenía una oferta del Manchester United y forzó todo lo que pudo para ser traspasado.
Varane, de menos a más en Old Trafford
Varane, como en sus últimos años en el Real Madrid, tuvo una primera temporada en el Manchester United con claros y oscuros. Sufrió para adaptarse el ritmo endiablado de la Premier League, a lo que se añadieron los problemas físicos que le han acompañado durante toda su carrera, aunque también dejó buenas actuaciones, demostrando que, en plena forma, es uno de los mejores centrales del planeta.
Y esta temporada, a pesar de una lesión que le dejó un mes en la enfermería, parece que Varane está recuperando su gran versión, siendo una de las claves de la excelente segunda parte de curso del conjunto de Erik Ten Hag, formando pareja en el eje defensivo con Lisandro Martínez. Con contrato hasta el 2025, Varane no se va a mover de Manchester el próximo verano. En el 2024 tendrá que tomar una decisión.
Gvardiol, objetivo complicado
Después de fichar a dos centrales veteranos como David Alaba y Antonio Rüdiger, el plan del Real Madrid es ahora incorporar un defensa de largo recorrido, como en su día hizo con Éder Militao. Raphael Varane, pues, tiene la puerta cerrada del Santiago Bernabéu, tanto por su traición como porque no cumple el perfil que busca el club blanco, además de que se lesiona con demasiada asiduidad.
Y el número 1 de la lista es Josko Gvardiol, que con solo 21 años ya está considerado como uno de los mejores centrales del mundo, como demostró en el Mundial de Qatar 2022. El central croata, que también dejó muy buenas sensaciones en el doble enfrentamiento del Red Bull Leipzig contra el Real Madrid en la liguilla de la Champions League, estaría encantado con jugar en el Bernabéu, como ya ha manifestado públicamente. El problema es económico, ya que media Premier League va detrás de Gvardiol, con ofertas económicas muy superiores a la del Madrid. Y el Leipzig quiere dinero.