Gerard Piqué ha concedido una breve entrevista en l'Esportiu para rememorar los diez años del Mundial que la selección española, con siete catalanes en el equipo, ganó en Sudáfrica. Con su tono bromista habitual, el central del Barça ha aprovechado la ocasión para regalar una sentencia que en Madrid probablemente traerá cola: "Me rompí la cara por España. Viva el rey. Venga, ya tienes titular," ha afirmado irónicamente.
El primer partido del torneo para el combinado de Vicente del Bosque fue un España-Suiza que acabó 0-1 y en el que Piqué, además, se partió la ceja. "La verdad es que perder así fue un golpe duro, pero nos recuperamos pronto. En un Mundial no puedes tener un mal día y aquel partido lo jugamos bien, dominamos y a la primera que tuvieron, un rebote estúpido y gol", ha rememorado.
Para Piqué, Xavi Hernández tuvo mucha influencia en el juego de aquel equipo, "pero sería injusto ignorar a Iker Casillas, Sergio Ramos o David Villa, que entonces jugaba en el Valencia y marcó cinco goles". "Aquella selección es el mejor ejemplo que por encima de un crac siempre hay el equipo. No teníamos un líder, estaban Iker, Xavi, Puyi; entre ellos tres, que eran los veteranos, se lo trabajaban, pero no había un líder", ha añadido.
Por último, según el central catalán, el buen rollo que había en la selección y el país donde se disputó el torneo fueron claves para que España se llevara el título. "Habíamos estado el año anterior en la Confederaciones y todo fue una castaña. Pensábamos: qué desastre nos espera. Y qué va, fue cojonudo. Estábamos en un lugar perfecto. Probablemente en otro sitio habría sido diferente. Y cuando ibas al partido, veías los guetos y eso te hacía pensar. Cojones, eso nuestro solo es fútbol. No llegabas con la tensión habitual, cada partido era una fiesta", ha afirmado.