A Gerard Piqué no le augura un buen futuro en el Barça. Aparte de haberse reforzado de manera excelente en la línea delantera, Joan Laporta y Mateu Alemany han centrado sus esfuerzos en apuntalar la defensa de un equipo que durante la pasada temporada mostró facilidades a la hora de encajar goles.
Sea como sea, las sensaciones que el conjunto culé dejó en el inicio de la temporada 2022/23 no fueron muy diferentes de las del último curso. Un empate amargo y bastante gris ante un equipo que ya hace tres partidos que se le hace cuesta arriba al FC Barcelona. Robert Lewandowski, Raphinha Dias, Ousmane Dembélé y compañía no fueron capaces de encontrar el gol ante un serio Rayo Vallecano, pero la temporada será muy larga y los cambios en el equipo de Xavi Hernández con respecto a la campaña anterior conjeturan buenas noticias para el barcelonismo.
Un inicio fatal para los capitanes del Barça
Es temprano para sacar conclusiones de este Barça y ventajista hacerlo después de un partido en que no se vio ni de lejos la mejor versión de los blaugrana. Con todo, hay que decir que los capitanes tuvieron un inicio de temporada fatal. Sergio Busquets, hizo un partido aceptable, pero una desafortunada acción cerca del silbido final le valió la expulsión. Jordi Alba fue otro de los señalados. El de Hospitalet de Llobregat no vio ninguna amonestación, pero tampoco acabó el partido porque Xavi lo cambió ante el irreconocible partido que hizo.
Sergi Roberto entró en el minuto 60 teniendo más rato sobre el césped de lo esperado, y es que el reusense no está a la altura del resto de este Barça. Lo ejemplariza a la perfección la elección de Xavi para la demarcación de lateral derecho. El técnico egarense decidió alinear como titular en el carril a un central como Ronald Araujo en detrimento de un Sergi Roberto que será suplente durante el resto de temporada. E incluso siendo el uruguayo el lateral, Gerard Piqué fue suplente. Christensen y Eric Garcia fueron la pareja de centrales escogida, y de hecho, fueron los hombres más competentes del combinado catalán junto con un Marc-André Ter Stegen que volvió a ser determinante.
Gerard Piqué, el que tiene el futuro más oscuro
Es Piqué quien tiene el futuro más oscuro en can Barça. El central de la Bonanova es el quinto central en el orden jerárquico de Xavi. No fue escogido ni con Araujo de lateral, pero la cosa se le complicará todavía más cuando el Barça pueda inscribir a Jules Koundé. El francés volvía de lesión y fue el descartado del Barça para ser registrado en la Liga por cuestiones de fair play financiero, pero lo que está claro es que el ex del Sevilla ha aterrizado en el Spotify Camp Nou para ser titular.
Lo puede hacer de lateral y en el eje de la zaga, pero en cualquiera de los casos, complicará las opciones a minutaje de Piqué. El veterano central barcelonés, aparte, está instado por el club a reducirse el sueldo, ya que es la única 'palanca' que el Barça puede activar junto con el diferimiento a Sergio Busquets. Habrá que ver si Piqué se lo rebaja, o si, por lo contrario, decide marcharse definitivamente del Barça en el mes de enero aceptando la siempre vigente oferta de David Beckham para ir a la MLS.