En el Barça hay más problemas de lo que se podría pensar. Aparte de la crisis económica y del flojo rendimiento deportivo, también hay conflictos internos dentro del vestuario. Y esto no ayuda nada a mejorar una situación ya de por sí complicada.
Tensión en el vestuario del Barça
Es conocido que en los últimos años ha habido grupitos en el vestuario. Como es normal en un equipo de más de veinte jóvenes. Pero había una cierta distancia entre dos de los líderes del equipo: Leo Messi y Marc-André ter Stegen. Ahora, sin embargo, sin el argentino en el equipo, continúan los problemas.
Durante el pasado Clásico entre el Barça y el Real Madrid se vieron caras largas, de preocupación, pero también alguna discusión entre jugadores blaugrana. La más evidente a ojos del espectador fue entre Gerard Piqué, uno de los capitanes, y el portero Ter Stegen. Tensión sobre el césped y tensión en el vestuario.
Nuevamente la plantilla está dividida en bandos, y dos pesos pesados como el portero y el defensa, muy cerca sobre el césped, están más separados que nunca fuera del campo.
Distanciamiento entre Ter Stegen y Piqué
Mientras se jugaba el Clásico, y viendo que el equipo tenía que remar para remontar, hubo discusiones sobre el césped que, posteriormente, se trasladaron al vestuario, según informa madrid-barcelona.com. La tensión empezó después de un penalti no pitado al Barça que el central barcelonés reclamó insistentemente al árbitro. Después fue Ter Stegen que pidió a Piqué que se centrara más en jugar a fútbol que en protestar.
Y la actitud adoptada no ha gustado nada ni a una ni a la otra parte. Al portero alemán no le gusta que Piqué se dedique a organizar un Mundial de Globos y que deje el Barça en un segundo término. Y el central cree que Ter Stegen se lo toma todo demasiado a pecho.
Pero lo que es cierto es que ni Ter Stegen está haciendo un inicio de temporada acertado, ni Piqué está siendo tan determinante como era habitual. Los dos, con los resultados en contra y viendo como el equipo va a la deriva, se enfrentan en otro incendio interno en el Barça después de la disputa entre el mismo Piqué y Busquets hace unos días, y del distanciamiento de los capitanes.
Si el club blaugrana tenía problemas, ahora se le añade uno de nuevo y no menos importante. Si hay un nuevo terremoto en el vestuario del Barça, nada puede acabar bien.