Como es habitual en los Juegos Olímpicos, algunos pronósticos que parecen claros no se acaban cumpliendo, mientras que aparecen nuevos talentos con los que pocos contaban antes de la cita. Y así ha sido este lunes. Por un lado, Simone Biles ha demostrado ser de carne y huesos al fallar en las dos últimas finales que le faltaban, las de barra y suelo. En la primera se ha caído, mientras que en la segunda solo ha podido ser plata, unos errores que han evitado que pudiera superar el récord de nueve oros olímpicos de la gimnasta rusa Larissa Latynina.
La otra cara de la moneda ha sido para Duplantis. El atleta sueco ha roto su propio récord mundial de salto de pértiga elevándose por encima de los 6.25m. Un hito histórico que será recordado como uno de los grandes momentos de estos Juegos. Por otro lado, el equipo femenino de 3x3 de baloncesto ha sumado una histórica plata derrotando a Estados Unidos en las semifinales. El combinado español no ha podido culminar el milagro en la gran final contra Alemania (17-16), pero toca metal en una de las disciplinas más novedosas y actuales de los Juegos. La otra alegría para la delegación española la ha protagonizado el fútbol masculino, que se ha clasificado para la gran final del viernes, lo que le garantiza como mínimo la medalla de plata, al superar a Marruecos en un partido muy intenso en el que la Roja ha tenido que remontar un 1-0 inicial. Lo ha logrado, en gran parte, gracias a un Fermín López de nuevo espectacular.
España no culmina el milagro contra Alemania (17-16) y suma una medalla de plata en baloncesto femenino 3x3
A pesar de no haber podido sumar el oro contra un Alemania que ha sabido ser más decisiva en los momentos clave de la final, la selección femenina de baloncesto 3x3 puede marcharse de estos Juegos Olímpicos con la cabeza bien alta. Contra todo pronóstico, han sido capaces de eliminar a Estados Unidos en la semifinal y adjudicarse una plata que sabe a oro.
El desenlace de la final ha sido cruel, decidido por un solo punto de diferencia (17-16) y con la emoción como bandera, pero España suma otra medalla para su delegación que se prepara para vivir una semana intensa, con muchas opciones de medalla.
La selección masculina de fútbol luchará por el oro después de una gran remontada contra Marruecos
Por segundos Juegos Olímpicos consecutivos, la selección española masculina disputará la gran final con el objetivo de redimirse de la derrota en Tokio. El conjunto de Santi Denia ha logrado el billete después de derrotar a Marruecos en un partido muy intenso en el que España se ha visto en contra en el marcador, y con las gradas apoyando al conjunto africano.
Ha sido entonces cuando ha aparecido Fermín López, gran líder del equipo en estos Juegos Olímpicos. El blaugrana ha logrado el empate, con un gran disparo al primer palo y, poco antes del final, cuando la prórroga ya asomaba, se ha inventado una excelente asistencia para Juanlu, que ha completado la remontada y ha asegurado la medalla. Ahora solo falta por decidir de qué metal será.
Simone Biles demuestra que es humana: caída en barra y fallos en suelo
Simone Biles no ha cerrado su participación en los Juegos Olímpicos de París como se esperaba. Después de lograr 3 oros en los días previos, la gimnasta norteamericana afrontaba este lunes sus dos últimas finales, las de barra y suelo, en las que era claramente favorita. Lo que parecían ser 2 oros más, sin embargo, se han convertido en un 5º puesto y en una plata, la demostración de que Biles es humana, de carne y huesos, dos errores que no enturbian una participación histórica en estos Juegos Olímpicos.
El primer fiasco, y más sonado, ha llegado en la final de barra de equilibrio, en la que Simone Biles, para estupor de todo el Bercy-Arena, se ha caído, la primera vez que le ocurre en una gran final, lo que ha dado aire a la italiana Alice D'Amato, que se ha bañado oro. El error ha dejado a Biles sin medalla, un fallo del que se podía redimir en la siguiente final, en suelo, su gran especialidad. No ha completado a la perfección dos de las cuatro diagonales, a lo que se ha añadido una penalización de 0.600 por la separación de los pies. Estos errores han dado opciones a sus rivales, una lucha en la que se ha impuesto la brasileña Rebeca Andrade.