El Celta de Vigo se encuentra en una posición muy tranquila en la clasificación, aunque todavía no están lo suficientemente lejos de las zonas de descenso, que están a seis puntos de distancia. Pero es realmente improbable que acaben perdiendo la categoría, motivo por el cual ya se permiten el lujo de pensar en los primeros movimientos que desean realizar de cara a la próxima campaña. Y Claudio Giráldez ha decidido algunas bajas.
Porque ya ha comunicado a varios jugadores que no cuenta con ellos, y no tienen espacio en sus planes, motivo por el cual tienen permiso para iniciar las conversaciones con otros clubes, y negociar las propuestas que reciban. Y uno de los ejemplos más evidentes es el de Javi Manquillo, quien en su momento llegó a ser considerado como uno de los talentos más prometedores que había en el panorama nacional, cuando militaba en las filas del Atlético de Madrid.
Diego Pablo Simeone le dio la oportunidad de debutar y de consolidarse en el primer equipo, pero nunca llegó a ser titular habitual, así que decidió hacer las maletas y mudarse a la Premier League. Y después de pasar por conjuntos de la magnitud del Liverpool, del Olympique de Marsella, del Sunderland o del Newcastle United, acabó regresando a La Liga EA Sports hace exactamente un año, para desembarcar en Balaídos.
Un fichaje que generó ilusión, y que estaba destinado al éxito, pero la realidad ha sido muy distinta. No ha logrado cumplir con las expectativas, y el papel que ha tenido en los sistemas de Giráldez ha sido completamente testimonial, viéndose relegado a un discreto segundo plano, por culpa de la presencia de Oscar Mingueza, que juega en la misma demarcación, y es uno de los cracks más en forma de la plantilla, y un ídolo para la afición.
Manquillo tan solo ha podido acumular un total de 548 minutos repartidos en 11 choques, y es evidente que su futuro pasa por salir del equipo gallego el 30 de junio, cuando finaliza su actual contrato.
Giráldez pide a la directiva del Celta que no ofrezca la renovación a Manquillo
Giráldez tiene totalmente sentenciado a Manquillo, y ha pedido a la directiva del Celta que no le ofrezca la renovación, y que permita su salida a final de curso de manera totalmente gratuita, es decir, tal y como llegó.
A sus 30 años, tendrá que buscar un nuevo desafío.