El París Saint-Germain está a las puertas de una enorme revolución. El conjunto francés no solo ha cambiado de entrenador, ya que Luis Enrique ha asumido el cargo en detrimento de Galtier, sino que deberá salir al mercado a buscar estrellas después de las salidas de Leo Messi y Sergio Ramos, a las que se pueden añadir las de Neymar, Verratti y la más dolorosa, la de Kylian Mbappé. El PSG, pues, tendrá mucho dinero fichar, aunque el mercado tampoco está para muchas alegrías, ya que los grandes jugadores disponibles escasean.
Y uno de los futbolistas transferibles que Luis Enrique ha puesto encima de la mesa nada más llegar ha sido Bernardo Silva, que lleva dos temporadas queriendo salir de Manchester. El portugués estuvo el verano pasado muy cerca del Barça, que no lo pudo fichar por falta de margen salarial, aunque para ahora esperaba recibir la llamada del club blaugrana. El Barça no lo descarta, aunque no dará el paso hasta que vea claro que puede inscribirlo en la Liga.
El PSG, a por Bernardo Silva
La entrada del PSG en la puja por Bernardo Silva, pues, es una noticia pésima para el Barça, que no puede competir económicamente con el gigante parisino. El PSG necesita estrellas, por lo que pondrá lo que haga falta para fichar a Bernardo Silva. En Francia se habla de 100 millones de euros, lo que exige el Manchester City, una cantidad que el Barça no piensa igualar.
Al Barça, pues, solo le queda que Bernardo Silva apueste por vestir de blaugrana y presione al Manchester City para que opte por la oferta del Barça. Joan Laporta puede llegar hasta los 80 millones de euros, por lo que Bernardo Silva deberá trabajar en los despachos para que el City se decante por el Barça, algo complicado, ya que 20 millones de euros es demasiado dinero como para renunciar a él.
Harry Kane, ¿y Dembélé?
Luis Enrique no se piensa conformar con Bernardo Silva, por el hecho de que considera que la plantilla del PSG necesita varios retoques. Necesita un central, un centrocampista, un extremo y un delantero centro, además de Bernardo Silva. La posición más importante será la del delantero, sobre todo si Kylian Mbappé acaba fichando por el Real Madrid. El problema es que en el mercado escasean los 9 puros que aseguren goles, por lo que el PSG va a ir con todo a por Harry Kane y Victor Osimhen.
Y para el extremo podría llegar la segunda traición, ya que el jugador que más suena en estos momentos es Ousmane Dembélé, que hasta el 31 de julio tiene una cláusula de 50 millones de euros, un auténtico caramelo para el PSG. Luis Campos lo va a intentar, aunque es consciente que, de momento, el extremo francés quiere seguir en el Barça.