Joan Laporta ya se está preparando para la primera purga en el Barça, en la cual cerrará dos salidas muy importantes para la economía del club, y que acompañará con tres fichajes. Tratará de que todo esto ocurra en enero, aunque es realista, y sabe que muy probablemente no todos estos movimientos podrán concretarse, y deberá de esperar unos meses más para cerrarlos. Lo primero, y más importante, será deshacerse de Jordi Alba y de Gerard Piqué.
Ambos han dejado de entrar en los planes de Xavi Hernández, y son los señalados para dejar el club después de prácticamente toda una vida allí. Lamentablemente el paso del tiempo se ha cebado con ambos, y el rendimiento que han ofrecido ha dejado mucho que desear. Entre eso, su avanzada edad, y el hecho de que perciban dos de las fichas más elevadas de la plantilla, provoca que en el Camp Nou busquen la manera de echar al ‘3’ y al ‘18’.
Se irán por la puerta de atrás, pues una parte importante de la afición ya está en su contra, y ha llegado a recriminar el paupérrimo rendimiento que han ofrecido. Pero son dos salidas que se antojan vitales para conseguir reducir la escala salarial y poder compensar de alguna manera la pérdida de ingresos que ha significado caer en la Champions League en la fase de grupos. Y de este modo podrían ayudar a traer a tres caras nuevas más.
El primero que llegará al Barça, si no hay sorpresas de última hora, es Vitor Roque, quien ya está prácticamente cerrado y apalabrado. Tan solo falta la confirmación oficial, una cosa que esperan que no se demore en exceso. Tiene 17 años, y en febrero cumplirá la mayoría de edad, así que están estudiando si es viable que aterrice en Europa un mes antes de lo permitido, aunque legalmente no podría debutar hasta que no haya cumplido los 18.
De momento están en negociaciones con su club, el Atlético Paranaense, y Laporta tratará de sacarlo lo más barato posible, para que se convierta en el delantero suplente de Robert Lewandowski.
Un lateral derecho y un pivote defensivo, las otras prioridades
Junto a Vitor Roque, los planes del Barça pasan por firmar a un lateral derecho y a un pivote defensivo, dos posiciones donde hay evidentes carencias. Héctor Bellerín es una solución temporal que no está funcionando, y aquí es donde han aparecido los nombres de Juan Foyth o Diogo Dalot, aunque son opciones muy complejas.
Para el centro del campo, Martin Zubimendi era el elegido, si bien también se habla de las llegadas de N’Golo Kanté o Jorginho Frello desde el Chelsea, sin descartar el regreso de Nico González desde el Valencia en el mercado invernal.