Quique Setién sigue siendo muy cuestionado en el Villarreal, como le ocurrió durante sus primeras semanas. La pasada campaña llegó para sustituir a Unai Emery, que sorprendentemente aceptó la oferta del Aston Villa, y se marchó cuando la temporada ya había iniciado. Era una misión difícil hacer olvidar al técnico vasco, que fue el único capaz de conquistar un título con el conjunto castellonense, ganando la Europa League de 2021 imponiéndose al Manchester United en la final.
Y las cosas no le han ido como se esperaba al antiguo entrenador del Lugo, de la UD Las Palmas o del Racing de Santander. Durante el verano ha visto como muchas piezas clave optaban por salir, ante la falta de confianza que mostraban en el proyecto, como han sido los casos de Pau Torres, de Samu Chukwueze, de Nicolas Jackson o de Arnaut Danjuma. Y los fichajes que han llegado no invitan a ilusionarse, ya que ninguno es una estrella consolidada.
Alexander Sörloth, el más mediático de todos, ha demostrado ser un delantero especialmente errático, mientras que Denis Suárez, Santi Comesaña o Ben Brereton están lejos de poder considerarse como decisivos, y son suplentes habituales. Las expectativas para este curso son realmente bajas, y los resultados no están acompañando en absoluto. Porque tan solo han podido sumar tres puntos de doce posibles en las primeras cuatro jornadas.
Únicamente fueron capaces de ganar al RCD Mallorca, cayendo contra el Betis, el Barça, y sorprendentemente, también contra el Cádiz. Son decimoquintos, y las malas sensaciones que están dejando han provocado que el nombre de Setién esté en la cuerda floja. Porque en el Estadio de la Cerámica se están planteando muy seriamente la posibilidad de prescindir de él, para contratar a otro entrenador que pueda sacar el máximo rendimiento de la plantilla.
Tampoco es ningún secreto que la relación entre el experimentado mánager de 64 y los pesos pesados del vestuario no es precisamente la mejor.
Setién ya se marchó del Barça y del Betis por la puerta de atrás
No sería la primera vez que Setién abandona el club en el que está por la puerta de atrás, pues ya le ocurrió una cosa similar en el Barça y en el Betis. Especialmente destacado fue su paso por el Camp Nou, donde solamente duró unos meses, y tuvo problemas con Luis Suárez, con Gerard Piqué, con Antoine Griezmann o con Leo Messi.
Su partido de despedida fue la derrota por ocho a dos contra el Bayern de Múnich, en cuartos de final de la Champions League.