Raphinha no solo se ha convertido en un problema dentro del terreno de juego. Su rendimiento sigue siendo irregular y estos altibajos no se los puede permitir el Barça con su fichaje estrella del pasado verano. No obstante, la entidad catalana no solo ha fichado un extremo zurdo, a menudo criticado por su falta de uno contra uno, sino que también ha llegado al club un jugador con una mecha más bien corta.
El extremo brasileño, a pesar de ser galardonado con el MVP en el gris empate de los blaugrana ante el Getafe, abandonó el partido antes de tiempo por orden de Xavi Hernández, siendo sustituido por Pablo Torre en los últimos minutos. Raphinha encajó mal la decisión, mostrándose, y no por primera vez, disconforme con el movimiento de su entrenador y quedándose sentado sobre el césped después del silbido final.
No es la primera vez que Raphinha protagoniza una rabieta
Ante el conjunto madrileño, Raphinha estuvo en la línea del equipo y volvió a no sumar con su falta de ideas que, desgraciadamente para el Barça, ya se va haciendo costumbre. No obstante, protagonizó una rabieta al abandonar el partido como la que tuvo lugar semanas atrás después del Barça-Manchester United del Camp Nou (2-2).
En ese entonces, el ex del Leeds sí que venía siendo el mejor futbolista sobre el césped y Xavi decidió cambiarlo para dar entrada a un Ferran Torres que, como también contra el Girona, poco aportó. Con todo, ya ha repetido un episodio que no sentó bien en las altas esferas del club, aunque el jugador pidiera perdón en 'petit comite' al entrenador.
La posibilidad del reintegro
No se puede decir que el fichaje de Raphinha haya sido un fracaso porque, ciertamente, el extremo de Porto Alegre es el segundo máximo goleador de la temporada del FC Barcelona con un total de 9 goles anotados y 9 asistencias repartidas en los 71 partidos en que ha participado. Sea como sea, también hay que decir que el barcelonismo empieza a echar de menos de lo lindo a un Dembélé que, cuando Raphinha ha aflojado, ha surgido la pregunta de cuándo se recupera.
Además, contando con el papel del francés, el Barça tiene en cuenta que el brasileño pasaría a ser un miembro de la rotación entre titulares y suplentes. Por esta razón, optar por la alternativa de la venta a sabiendas de que existe la posibilidad del reintegro de los 58 millones de euros que costó, podría ser una gran alternativa para el club a la hora de querer reforzar otras posiciones.