Raphinha no está dando problemas solamente en los partidos. También ha protagonizado un escándalo en uno de los últimos entrenamientos del Barça, lo que refleja la complicada personalidad que tiene el internacional brasileño, que ha comenzado a desesperar a Xavi Hernández. Y esto ha provocado que los rumores que hablan acerca de su salida aumenten considerablemente, y se convierta en un firme candidato a hacer las maletas.
Porque su nivel no ha convencido en absoluto, ni ha justificado los 60 millones de euros que pagaron al Leeds United. Si a eso le añadimos la pésima imagen que ha dejado siempre que ha sido sustituido, como contra el Manchester United o contra el Getafe, dejando un show patético, Joan Laporta cada vez tiene más motivos para colocarlo a la venta. Especialmente ahora que se ha conocido que también ha tenido problemas con dos jugadores de la plantilla.
El ‘22’ pagó su frustración en un rondo, y pudo lesionar a más de un compañero llegando tarde a los balones divididos, y empleándose con demasiada dureza. Como es lógico, esto no gustó en absoluto a los afectados, que no dudaron en reprochar esta actitud al extremo de 26 años, que en lugar de pedir perdón y reconocer el error, no quiso admitir que se había equivocado. Esto generó un mal ambiente que obligó al resto del equipo a tener que intervenir.
Varios futbolistas que no estaban implicados en esta discusión quisieron poner calma al asunto, y trataron de tranquilizar especialmente a Raphinha, que tenía un enfado monumental. No querían que la cosa fuera a más, y acabara en una pelea como la que protagonizaron en su momento Marc-André ter Stegen y Leo Messi. Y, como es lógico, Xavi también tuvo que aparecer en la escena, para hablar personalmente con los protagonistas de esta pequeña discusión, que afortunadamente quedó en anécdota.
Sin embargo, al ex técnico del Al-Sadd no le gustaron nada las formas del atacante, y así se lo hizo saber. La relación entre ambos está fracturada, y cada día son más distantes.
Raphinha, molesto con las palabras de Xavi
Raphinha también se marchó muy molesto con las palabras que Xavi le dijo después del mencionado episodio en un entrenamiento, ya que soltó que esa intensidad era la que quería ver en los partidos, y que no mostraba casi nunca.
Al parecer, esto no hizo gracia al futbolista del Barça, que se lo tomó como una crítica destructiva e injustificada. Una marcha parece la mejor solución para todos.