El Real Madrid no ha fallado y la polémica no ha faltado tampoco. Los blancos han derrotado al Villarreal (2-1) con un doblete de Karim Benzema y han conseguido su 34.ª Liga de su historia después de haberlo ganado absolutamente todo después del parón por el coronavirus: 10 de 10, pero con claro protagonismo del VAR.
Vergonzosa temporada del Barça
No ha sido cuestión de un partido puntual sino de un hecho repetitivo: el Madrid ha recibido favores arbitrales. Esto no es ninguna excusa hacia la vergonzosa temporada del Barça en la que no han sido capaces ni de tirar de orgullo contra el Osasuna (1-2), pero sí que se tiene que hablar del trato de favor hacia la entidad blanca.
Este jueves ha vuelto a ser un ejemplo. En un día como hoy, la polémica no podía faltar. Sergio Ramos se ha tirado dentro del área y el árbitro ha pitado penalti cuando no era. El andaluz ha intentado hacer la jugada, que protagonizaron en su día Messi y Suárez, en el que el argentino cedió el penalti hacia el uruguayo con un pase, con Benzema como socio. El resultado ha sido que el francés se ha avanzado antes del chute y el colegiado ha decidido repetir la pena máxima. Incertidumbre de los jugadores del Villarreal que no entendían cómo se podía repetir un penalti cuando el error era de los blancos.
Benzema ha transformado desde los once metros y ha certificado el gran momento de forma en el que está. Ahora mismo es la estrella y la referencia del Madrid y es la gran esperanza de Zidane para cambiar la eliminatoria de octavos de final de Champions League contra el Manchester City de Pep Guardiola.
El Villarreal ha estado vivo hasta el final
En el partido en el Di Stéfano, el Villarreal ha recortado diferencias con el gol de Iborra y ha estado a punto de empatar el partido en los minutos finales. Pero ha sido entonces cuando ha salido la figura de Thibaut Courtois en la que ha sido providencial para certificar la victoria blanca.
Real Sociedad, Mallorca y Athletic han sido los tres partidos post-confinamiento en los cuales se ha presenciado los arbitrajes favorables hacia el Madrid y el VAR necesita una revisión urgente de su criterio. Mientras tanto, los blancos celebran su título que vale como otro.
Esta temporada ha sido extraña, con un parón de tres meses por la Covid-19, y con la disputa de los partidos sin aficionados como medida de prevención. Ahora queda pendiente la Champions, una competición que puede pasar absolutamente de todo y seguro que hay sorpresas.