A pesar del pase a los cuartos de final de la Champions League, el partido contra el Red Bull Leipzig dejó muchas dudas en el Real Madrid. La falta de puntería de los alemanes salvó al conjunto blanco de una debacle europea. Aunque el resultado fue favorable, las sensaciones son preocupantes y exigen un cambio en los próximos partidos.
Esto podría dejar unos cuantos damnificados por parte de Carlo Ancelotti. El primero de ellos, y más claro, es Eduardo Camavinga. El francés fue el primer cambio del partido, ya que ni siquiera salió al terreno de juego después del descanso. El técnico italiano dio entrada a Rodrygo, que tampoco solucionó los problemas del equipo, pero sí que sirvió para señalar a su compañero.
Camavinga paga los platos rotos
"Es solo un cambio táctico porque si tuviera que cambiar a los que no han estado bien, tal vez habría que cambiarme a mí en el banquillo", declaró Ancelotti en la rueda de prensa posterior al partido sobre la sustitución de Camavinga. Aunque las palabras del entrenador blanco buscaban defender al francés, lo cierto es que el jugador fue el primer señalado por la actuación del equipo.
El centrocampista no está teniendo su mejor temporada. Después de ganarse un hueco en el equipo por su gran rendimiento en el equipo entrando desde el banquillo e, incluso, jugando en posiciones nuevas para él como el lateral izquierdo, parecía que esta podía ser el año de su consagración. Pero no está siendo el caso.
Con problemas en la rodilla
Lejos de entrar en pánico, la directiva blanca cree haber identificado la causa del decepcionante rendimiento del galo. Esta es el esguince de rodilla que sufrió el pasado 15 de noviembre con su selección y que le tuvo cerca de dos meses de baja. El jugador parecía haber vuelto en condiciones, pero poco a poco se le ha visto tener problemas en los pases y en los duelos, probablemente por culpa de la rodilla.
Por ello, el objetivo tanto del equipo técnico como de los servicios médicos es que el jugador pueda volver a mostrar su mejor nivel. Antes de encarar el tramo decisivo de la temporada, Ancelotti quiere asegurarse de que el jugador se recupera de sus problemas físicos, por lo que está dispuesto a cuidarlo más y darle más descanso. Habrá que ver si los resultados permiten muchas rotaciones, pero con jugadores como Tchouaméni o Kroos, el francés no debería de tener la necesidad de forzar la máquina más de lo necesario.