Parece que nadie quiera ganar la Liga Santander excepto una persona: Sergio Ramos. Después que el Barça se haya dejado dos puntos más, el Real Madrid ha sufrido pero ha resuelto un decepcionante partido contra el Getafe gracias a un inocente penalti que ha transformado su capitán en el tramo final del duelo (1-0).

El Madrid no juega a nada

Si el Barça de Quique Setién no juega a nada, el Madrid tampoco lo hace. Ni con Modric, Kroos e Isco en la zona de creación, y con Benzema en la zona de ataque. Los partidos contra el Getafe siempre son diferentes, sobre todo porque los de José Bordalás son un hueso duro de roer.

Sobre el césped del Estadio Alfredo di Stéfano sólo ha existido un equipo. Y este vestía de color azul. El Getafe ha sido protagonista por una presión altísima e incansable durante todo el partido que ha dejado al Madrid ahogado y sin opciones a hacer nada. Cada posesión de los blancos acababa en pies de algún jugador del Getafe porque los del Madrid no tenían más de dos segundos para pensar qué hacer antes que un rival llegara a su lado.

Vinícius durante una jugada del partido

Durante la primera hora de juego, un tímido aviso de Vinícius, otro de Isco y una caída de Casemiro en la frontal del área que muchos merengues ya celebraban como un penalti. El Madrid ha estado totalmente inconsistente y desaparecido. Por el contrario, el Getafe ha demostrado estar físicamente al 200% y ha sido una auténtica pesadilla para el Madrid.

Sin nueva vida para el Barça

A falta de media hora de juego el conjunto blanco por fin ha movido fichas: han entrado Asensio, Rodrygo y Fede Valverde en el sito de Isco, Modric y Vinícius. El partido se ha roto y de esta manera el líder ha podido hacer daño a su rival.

Zidane hablando con Isco

Todo el mundo pensaba que el Getafe se acabaría cansando, que la asfixiante presión en algún momento se acabaría y que el Madrid tendría ocasiones claras. Y nada de eso ha pasado. Pero sí que han encontrado un regalo de Olivera, que ha cometido un inocente penalti sobre Carvajal. Quedaban diez minutos para el final y Sergio Ramos no ha fallado.

El Madrid se ha llevado tres puntos sin merecerlo y gracias a una nueva pena máxima. Desde el punto de penalti se encuentra como casa. Esta vez, sin embargo, sí era falta dentro del área. El Madrid es más líder y empieza a acariciar el título de Liga, mientras el Barça se empieza a despedir del trofeo.