Volvía el Real Madrid al Santiago Bernabéu después de un partido para olvidar ante el Leipzig, en Champions League, que generó el runrún en la grada madridista. Los de Carlo Ancelotti han llegado a su partido ante el Celta con la presión de saber que tanto Girona como FC Barcelona habían hecho los deberes en sus respectivos duelos. El actual líder de LaLiga EA Sports quería regalarle a los suyos una gran actuación y, de paso, seguir poniendo tierra de por medio a sus más inmediatos perseguidores.
Y ha cumplido con su cometido el conjunto local que no pierde fuelle en la competición doméstica. Lo ha hecho en un enfrentamiento con muy poco brillo, con un gol de Vinícius Júnior (20'), de Vicente Guaita, en propia portería (79'), otro de Carlos Domínguez, también en propia (87'), y el de Arda Güler (90+3') para cerrar la goleada, ante un Celta incapaz de incomodar la portería defendida por Lunin. No ha regalado una buena actuación el conjunto local al Santiago Bernabéu, pero sigue sacando los resultados para seguir imparable al frente de la clasificación.
Vinícius abre la lata...
Ha salido el conjunto merengue muy ofensivo, volcándose sobre la portería de un Vicente Guaita que hoy ha tenido mucho trabajo. Desde el inicio del enfrentamiento, el Real Madrid ha estado avisando, con cada vez más peligro, a un Celta que ha querido salvaguardarse atrás, para hacerle el partido largo a los locales, y esperar a que se le atragantara. Pero, en el minuto 3, Camavinga ya ha avisado con el primer lanzamiento a portería, que ha acabado en las manos del portero valenciano. Ha sido el francés quien ha vuelto a avisar con un remate de cabeza que ha obligado a actuar, de nuevo, al portero celtista.
El Celta, por su parte, no ha sido capaz de meter demasiado miedo en el cuerpo de un Real Madrid que seguía dominando sin excesivos esfuerzos. Una llegada a la contra, que ha acabado con un chute de Manu Sánchez muy desviado, ha sido lo más destacable de los de Rafa Benítez. Ha sido entonces cuando los blancos han entrado en una especie de calma, con el control del balón, que precedía a la tormenta. Corría el minuto 20 cuando un servicio de esquina botado por Luka Modrić ha significado el gol de Vinícius. El córner del croata lo ha acabado rematando Antonio Rüdiger y, tras dos paradones de Guaita, el brasileño ha aprovechado el rechace en el área pequeña para abrir la lata.
No ha inquietado el Celta en exceso a un Real Madrid muy cómodo, que ha seguido atacando la portería rival, ante una defensa que daba la sensación de fragilidad. Lo mejor para el conjunto de Benítez al descanso, ha sido el resultado, porque han podido irse con alguno más al vestuario, de no haber sido por Guaita.
... y Rüdiger sentencia en un partido sin mucho misterio
Sabía Benítez que los suyos tenían que ser más agresivos en la segunda parte y se lo ha recalcado en el descanso, porque en la reanudación, a pesar de las evidentes dificultades, se ha visto a otro Celta sobre el césped. Han tratado de presionar arriba los vigueses, para incomodar a un Real Madrid que en los primeros 45 minutos no ha sufrido apenas. No ha sido demasiado efectivo el plan perpetrado por los visitantes, pues los de Ancelotti han seguido dominando sin sentirse amenazados.
Como era de esperar, han seguido siendo los locales quienes han impuesto su ritmo, aunque sin acabar de sentenciar el partido. A pesar de acercarse a la portería de Guaita en numerosas ocasiones, no era capaz de marcar el Real Madrid el gol de la tranquilidad, por lo que el Celta seguía vivo, lo cual, a pesar del dominio, siempre genera algo de duda. Seguían con su plan los de Carletto, acumulando llegadas al área rival, sin un fútbol demasiado vistoso, mientras los visitantes ni siquiera eran incapaces de incomodar.
Estaba el partido muy aburrido, espeso, demasiado calmado para un Real Madrid que iba a medio gas. Ha animado el ambiente Rüdiger que, de nuevo a la salida de un córner, ha puesto el dos a cero, tras un imponente remate de cabeza que ha pegado en el larguero, para tocar en Guaita y colarse dentro. Un gol que ha maquillado más el resultado de un duelo al que le faltaba el tercero, de Carlos Domínguez, también en propia portería, y el de Arda Güler, en una gran definición ante Guaita para cerrar la goleada. Un enfrentamiento en el que no ha habido mucho más a destacar porque, a pesar del resultado, no ha tenido demasiado chiste. 3 puntos más para un Real Madrid que, sin brillar, sigue a la cabeza.