El Real Madrid y Florentino Pérez no quieren perder más poder. Después de quedarse sin Cristiano Ronaldo, ahora no quieren desprenderse su cerebro sobre el campo. Luka Modric, tanteado por el Inter de Milán, parece que no se marchará del Madrid o al menos no será fácil que se vaya.
La última de Florentino ha sido denunciar al Inter ante la FIFA por hablar con el jugador y su entorno por un posible cambio de aires, cosa que dentro de los reglamentos es ilegal por el hecho de tener un contrato superior a los seis meses, según ha adelantado la SER.
Y a partir de aquí llega la incoherencia, porque el Real Madrid y Florentino no son unos santos. Este mismo hecho que denuncian ellos lo han calcado en muchas ocasiones.
Este mismo viernes cierra el mercado en Italia y a no ser que llegue una sorpresa de última hora, Modric seguirá en el Madrid. Florentino Pérez podría haberse salido con la suya.