Pesadilla en el Santiago Bernabéu. El Real Madrid ha perdido contra la Real Sociedad (0-2) y prácticamente se despide de la Liga. Los hombres de Santiago Solari han realizado una mala primera mitad y un segundo tiempo todavía peor donde han sido atropellados por el conjunto vasco, que recupera credibilidad de la mano del debutante Imanol Alguacil. El mejor jugador del Madrid ha sido Vinícius, hecho que refleja la inoperancia del resto de la plantilla blanca. Solari tiene motivos para estar preocupado. Su equipo no juega a nada y su cabeza corre peligro.
Día de la marmota en el Bernabéu
La primera mitad ha servido para constatar que el Real Madrid sigue siendo un equipo frágil e inofensivo. Frágil, porque en sólo tres minutos la Real Sociedad se ha puesto por delante en el marcador gracias a una diana de Willian José, que ha transformado un penalti estúpido de Casemiro sobre Mikel Merino. E inofensivo, porque no ha conseguido empatar el partido aunque ha disfrutado de ocasiones muy claras.
El gol visitante ha sido un golpe muy duro y la afición del Santiago Bernabéu, cansada de ver cómo su equipo es incapaz de mostrar cierta consistencia, ha reaccionado con una pitada notoria.
El cachete vasco ha sido contundente pero lo cierto es que el equipo de Santiago Solari ha reaccionado. Comandados por Vinícius -titular por delante de d'Isco- los blancos han disfrutado de oportunidades para empatar. Karim Benzema, Modric, Lucas y el propio brasileño han podido marcar, pero un día más el Madrid ha añorado la efectividad de Cristiano.
Con este escenario se ha llegado al descanso. El Bernabéu ha respondido abroncando a sus hombres mientras Isco se escondía en el banquillo del feudo madridista. Solari, el centro de todas las miradas, debía reaccionar.
EFE
Lucas condena su equipo
Si algún seguidor del Madrid se pensaba que la visita a los vestuarios conseguiría cambiar las cosas, estaba bien equivocado. La Real Sociedad ha saltado al terreno de juego con más intensidad y ha podido conseguir el segundo gol de la noche gracias a Mikel Oyarzabal. Su disparo, sin embargo, ha salido fuera por muy poco.
A partir de este instante el partido se ha convertido en un auténtico combate de boxeo en el cual el intercambio de golpes ha estado en el orden del día. Especialmente cuándo Solari ha sacrificado a un jugador defensivo como Casemiro y ha apostado por el discutido Isco.
Vinícius ha podido marcar pero la Real también gracias a Adnan Januzaj. Y en medio de la fiesta, una expulsión. Lucas Vázquez ha olvidado que tenía una tarjeta amarilla y ha hecho la zancadilla a Merino. Expulsión y juicio de un Bernabéu que no entiende porque uno de los futbolistas menos técnicos de la plantilla tiene tantos minutos.
Jugar con diez, como es lógico, ha penalizado el Real Madrid. La Real Sociedad del debutante Alguacil ha demostrado una gran personalidad y ha buscado el segundo con insistencia. Quien ha podido empatar, sin embargo, han sido los hombres de Solari. Vinícius -el mejor del Madrid- ha regateado Rulli y el portero argentino lo ha tirado al suelo. Ni Munuera Montero ni el VAR han considerado que fuera penal y el Bernabéu ha vuelto a entrar en erupción, esta vez en contra del colegiado.
El Madrid se ha desesperado pero la Real Sociedad no. El conjunto vasco, consciente de que los blancos se volcarían en ataque, han apostado por sacar la pelota desde de atrás con calma y la estrategia no le ha podido salir mejor. En el minuto 83, Rubén Pardo ha sentenciado el partido después de finalizar una contra de libro.
El cambio de año no ha ido bien al Real Madrid, que primero empató en Villarreal y ahora pierde en casa contra un rival muy inferior. Si el Barça hace los deberes los blancos se situarán a diez puntos del primer lugar y prácticamente podrían decir adiós a la Liga. Quien también se puede decir adiós es Solari, y es que la credibilidad del técnico argentino queda muy tocada. Florentino tiene muy poca paciencia y Mourinho, muchas ganas de volver.