Las bolas han decidido. Al Real Madrid la espera el Chelsea en los cuartos de final de la Champions League tal como lo hizo en la anterior edición. El conjunto blanco volverá a decidir su destino contra el equipo blue, esta vez, con ida en el Santiago Bernabéu el próximo 11 de abril y vuelta en Stamford Bridge el día 18 del mismo mes.
Mientras tanto, el Manchester City ha conocido la cara más oscura del sorteo. Los de Pep Guardiola tendrán que jugarse la suerte con el temible Bayern de Múnich si quieren volver a soñar con una Champions que, como no, fue una remontada del Real Madrid que les eliminó.
Benfica-Inter y Milan-Nápoles, los otros dos choques
A juzgar por las sensaciones que está dejando el Chelsea en la Premier, el Real Madrid parte como favorito en su eliminatoria. En caso de superarla, su rival en semis sería el ganador del duelo entre City y Bayern.
En paralelo, en el otro lado del cuadro, el Benfica se verá las caras con el Inter de Milán. No es el choque con más nombre, pero ambos equipos parten desde la máxima igualdad y dejarán una eliminatoria digna de ver. Los italianos llegan después de eliminar al Oporto con un único gol de Lukaku en el partido de ida, mientras que el conjunto lisboeta ha accedido entre los ocho mejores de Europa después de arrollar al Brujas con un marcador global de 7-1.
Los cuartos restantes los configuran Milan y Nápoles, dos equipos que, a su manera, siguen haciendo historia. Para los rossoneri, porque están de vuelta en las fases definitivas de la máxima competición europea, mientras que los de Spalletti, al son de Osimhen y Kvaratskhelia, se han clasificado por primera vez en su historia para los cuartos de final de la Champions League.
El cuadro proporciona a un finalista inédito
La hegemonía del fútbol italiano parecía cosa del pasado, pero el país transalpino es el más representado en estos cuartos y, con suerte, pueden meter a dos de sus equipos a semifinales. Sea como sea, con Bayern y Manchester City autodestruyéndose uno de los dos y Real Madrid y Chelsea haciendo lo propio, solo quedará un finalista del lado de la muerte, mientras que saldrá otro de entre los Inter, Benfica, Milan y Nápoles. Sin duda, el lado de las vanguardias proporcionará una final inédita.