Llegaban ambos equipos con dinámicas y necesidades muy distintas, pero con un ambiente caldeado por los precedentes entre ambos, sobre todo el que se protagonizó el año pasado en Mestalla con Vinícius Júnior y que sigue en plena efervescencia. Un hecho que ha provocado, aunque eso no es nada nuevo en el feudo valencianista, que los incondicionales fans ches abarrotaran las gradas. El Real Madrid, por su parte, en plena lucha por seguir manteniendo la distancia con su inmediato perseguidor por la conquista de LaLiga EA Sports, y el Valencia con la intención de asaltar las zonas europeas.
Un clásico de nuestra liga que se ha saldado con el empate de un Valencia que se ha puesto con dos goles de ventaja y que ha quitado algo de protagonismo a Vinícius, pero que como las grandes estrellas ha aparecido en dos ocasiones para salvar el empate de su equipo (45+5' y 77') e igualar los goles de Hugo Duro (27') y Roman Yaremchuk (30'). Al final, el brasileño, que lleva queriendo ser el actor principal de este partido desde inicios de semana, no ha podido llevarse los 3 puntos, ni entrar con sus cámaras de Netflix, pero ya tiene la portada para su documental.
Dos errores condenan al Real Madrid...
Ha salido muy intenso el Valencia, sobre todo muy encima de Vini, pitado desde el principio por la afición blanquinegra, y Rodrygo Goes. No obstante, los de Carlo Ancelotti han bajado rápidamente las revoluciones del partido, haciéndose con el control de la pelota, para enfriar la embestida inicial del Valencia, pero sin peligro. Un guion, nunca mejor dicho en un día como hoy, que no preocupaba al Valencia, que seguía esperando atrás a que llegara su momento y que se desatara la tormenta.
Y ha llegado a los 27 minutos de partido. Error de Vinicius ante Foulquier sobre la línea de fondo, que pone el balón para Fran Pérez en el segundo palo, que remata en semifallo para el cabezazo final de Hugo Duro, que estaba preparado con la caña puesta. No se ha hecho esperar el segundo gol del Valencia. Ya había avisado Fran Pérez, que se equivocó en el recorte final, pero a la media hora de partido, un error de Dani Carvajal iba a suponer la diana de Yaremchuk. El lateral ha querido ceder hacia Lunin con un pase hacia atrás, que ha interceptado el delantero ucraniano para deshacerse con facilidad de su compatriota y marcar a puerta vacía.
Dos golpes directos al mentón que han dejado grogui a los futbolistas del Real Madrid que, a partir de ese mismo instante, han empezado a encadenar error tras error, que bien podrían haber supuesto el tercer gol valencianista de haber tenido más acierto. Un conjunto capitalino que tenía toda la segunda parte para hacer lo que mejor se le da, remontar a la épica, porque antes del final de los primeros 45 minutos, Vinicius (desaparecido hasta el momento), ha aprovechado un rebote en el área para recortar distancias.
... a remontar en la segunda parte
En la reanudación, el Real Madrid ha impuesto la típica calma que precede a la tormenta, porque ha hecho lo que tenía que hacer, asediar la portería de Mamardashvili. En el minuto 53, Jude Bellingham, poco activo hasta el momento, ha tenido cerca el empate, pero el portero georgiano lo ha evitado con una gran intervención con los pies. Los merengues han empezado a volcarse sobre el área valencianista, embotellando a sus rivales.
Rubén Baraja lo ha visto y se ha decidido a mover el banquillo, con una sustitución que a punto ha estado de dar sus frutos. A la hora de partido, Fran Pérez ha puesto un centro medido a los pies de Diego López, que ha entrado de refresco, que ha estado cerca de hacer el tercero y sentenciar el partido. Solo Lunin, imitando la anterior parada de su homólogo en el Valencia, lo ha evitado sacando los pies.
Pero, el Real Madrid, apelando a su histórica épica, lo ha vuelto a hacer. En el minuto 77, de nuevo, Vinicius, empeñado en salir victorioso de su particular guerra contra el Valencia, ha vuelto a hacer acto de presencia. Dos apariciones del brasileño y dos goles. Esta vez después de un gran centro que ha rematado a placer. Un empate que, tras otras provocaciones de Vini hacia la grada, han vuelto a encender los ánimos.
Se han lanzado los dos equipos a por el tercero, tras un suculento descuento, debido a la desgraciada y desagradable lesión de Diakhaby. Unos últimos minutos que han sido un auténtico carrusel de emociones que nos han dejado un final de infarto y con el desagradable protagonismo de Gil Manzano, en una extraña decisión y que ha decidido pitar el final en un centro del Real Madrid que acabado en un gol... que no ha valido.