El Real Madrid se va a dormir líder de la Liga Santander después de vencer y convencer en su visita al Celta de Vigo. Karim Benzema, Luka Modric, Vinícius Júnior y Fede Valverde no perdonarían a un Celta alegre en ataque, pero descuidado en defensa.

10 minutos tardaría Balaídos en revivir fantasmas

El voluntarioso inicio 'celtiña' acercaría el primer gol del partido a los locales. No obstante, 10 minutos tardaría Balaídos en revivir fantasmas. Si la visita del Real Madrid al feudo de los gallego de la pasada temporada estuvo marcada por los penaltis, en el minuto 10, David Alaba embocaría desde la frontal del área pequeña un balón peinado estrellándolo en el brazo de Renato Tapia. Penalti irrefutable que transformaría Karim Benzema engañando a Marchesín.

Karim Benzema, celebrando el primer gol del Celta-Real Madrid / Foto: EFE

A pesar del revés, el Celta seguiría asumiendo el peso del juego. Argumentos no les faltaban. Desde Tapia y Fran Beltrán en la creación, hasta Cervi, Óscar y Iago Aspas en la zona de tres cuartos, harían que los celestes pasaran la mayor parte de la primera mitad en terreno blanco. De añadida, el inconmensurable esfuerzo ofensivo de Javi Galán y Hugo Mallo sería una amenaza constante por ambas bandas. Precisamente, desde las botas del pontevedrés provendría el centro que propiciaría el penalti a favor de los gallegos. Mallo encontraría a Paciência, que peinaría buscando la portería, pero encontrándose con la mano de Éder Militao. Minuto 23, penalti, e igualdad en el marcador de nuevo por cortesía de Iago Aspas.

Desde entonces, el Real Madrid empezaría a ser más reconocible. Recuperaría la posesión y propondría por primera vez en el enfrentamiento. Vinícius no pararía de intentarlo, pero emergería la figura de Luka Modric para impartir cátedra y ganarse la ovación de la afición rival cuando ha sido sustituido en la segunda parte. El croata aportaría el aplomo en la medular que dos jóvenes como Tchouaméni y Camavinga no han sabido demostrar. Primero lo haría asestando un golpe psicológico al Celta mediante un golazo desde fuera del área al filo del descanso. Más tarde, ya en la reanudación, aprovecharía los espacios de un Celta al descubierto en defensa para dejar a Vinícius solo en el uno contra uno. Imparable carrera del brasileño en solitario, y ante la salida en falso de Marchesín, recorte para superarlo y 1-3 en el marcador.

Vinícius Júnior, marcando su gol contra el Celta / Foto: EFE

El Real Madrid no perdona una contra

Podía parecer abultado el marcador y más para un Balaídos enfurecido después de haber pedido algún penalti sin correspondencia. Sin embargo, cuando el balón ha caído en botas de los aviones del conjunto merengue, el Real Madrid no ha perdonado una contra. Si 'Vini' hacía el tercero, Fede Valverde aprovecharía de nuevo los espacios concedidos para hacer el 1-4 definitivo. El Madrid no disfrutaría de ocasiones manifiestas de gol, pero está claro que la efectividad de este equipo es lo que le ha hecho pasar por encima del Celta de Vigo. Con todo, Hazard tendría la oportunidad de hacer el quinto después de que Gil Manzano señalara un nuevo penalti a favor de los blancos, pero Marchesín se haría grande bajo palos para negarle la pena máxima al belga.

Así pues, el Madrid duerme líder, y lo hace después de convencer en la visita a un estadio siempre complicado como lo es Balaídos.